El invierno siempre hace de las suyas, factores como el frío, la ropa pesada, el viento y los rayos UV pueden ocasionar algunas complicaciones en tu piel como comezón, enrojecimiento e irritación por la resequedad. Si eres de piel sensible, debes prestar aun más atención, en especial si presentas sequedad severa.
Lo que pasa durante el invierno es que los niveles de humedad bajan y la piel reacciona liberando hidratación, lo que provoca que ésta se seque cada vez más. Para evitar complicaciones, lo más sencillo es aplicar un tratamiento nutritivo intenso, al menos dos veces al día, sobre todo en la cara y labios.
Al elegirlo debes fijarte que este contenga ingredientes hidratantes como lípidos para evitar la pérdida de agua transepidérmica. Nuestra recomendación es la línea Lipikar de La Roche-Posay, que desde hace 20 años ha salvado a niños y adultos que sufren de sequedad severa con tendencia a dermatitis atópica.
La línea está especializada en el cuidado de pieles muy secas, que brinda hasta 48 horas de hidratación. Gracias a ingredientes como la Niacinamida, ayuda a calmar la piel, mientras que la manteca de Karité, aporta una hidratación intensa y Aqua Posae Filiformis (exclusivo ingrediente patentado por la marca) ayuda a re equilibrar el mircobioma, un escudo formado de bacterias que viven en armonía con la piel formando un “muro” que sirve como defensa de ataques externos.
Encontrarás una variedad de jabones, lociones, cremas y barras humectantes que contribuyen a la salud y al funcionamiento adecuado de la piel normal a seca en una rutina muy fácil de aplicar diariamente.
Aplícalos diariamente después de la ducha y procura que la temperatura de esta siempre sea templada. A la hora de secarte, no frotes, mejor da golpecitos suaves en la piel para ver mejores resultados.
Adicional a esto, asegúrate de beber la suficiente cantidad de agua que necesita tu cuerpo y mantener un nivel de humedad saludable en casa.
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