En 1923 fue puesta una estructura para salto de esquí en Holmenkollen, Noruega. Ésta llamó la atención en los Juegos Olímpicos de Invierno de 1952, y después de casi 60 años, en 2010 fue completamente reconstruida y llamada “the world’s most modern ski jump“. Pero no sólo se trata de una sorprendente rampa donde los mejores esquiadores se elevan por el cielo nórdico, sino que justo en la cima se encuentra una acogedora habitación con una vista increíble.
200 pies de alto son los que separan de la superficie al Ski Jump, donde los deportistas se preparan para despegar frente a más de 30,000 espectadores, durante los juegos de invierno. La moderna habitación con ventanales, tiene una cama para 2 personas, un baño, una cocina y servicio de WiFi, con el que podrás compartir imágenes de la aurora boreal, si tienes suerte de visualizarla.
El hospedaje es gratuito, aunque es por medio de un sorteo que consiste en decirle, en 100 palabras, a AirBnB por qué quieres pasar la noche del 26 o 27 de marzo ahí. Sí, el texto más emotivo y original es el ganador de la estancia. Sin importar su origen, la compañía regala también el vuelo al destino.