Múnich es una ciudad que define el concepto de ‘primer mundo’ en todos sus aspectos. Desde su arquitectura y gastronomía, hasta el transporte público y el trato de los locales a los turistas, es excepcional. Visitarla es una experiencia muy especial, ya que no es un lugar que se puede conocer simplemente al caminar por sus calles. Aquí la magia sucede cuando cruzas las puertas, cuando te adentras en cada lugar al que vas.
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Pero para que todo comience con el pie derecho, el hotel donde te vayas a quedar no se debe escoger a la ligera. Aquí es donde vale la pena invertir, ya que después de recorrer cada rincón de la ciudad, necesitarás la máxima comodidad y servicio que los alemanes saben ofrecer. Y aunque hay una interesante oferta de excelentes hoteles de cinco estrellas, The Charles Hotel destaca por una serie de razones que estamos seguros serán las suficientes, para que se convierta tu casa en tu próxima vista a Múnich. Tuvimos la oportunidad de hospedarnos ahí durante cuatro noches y cinco días y por eso, a continuación te compartimos por qué quedamos enamorados de este lugar:
Su ubicación es PER-FEC-TA
Está localizado muy -muy- cerca del centro. Está solo a un par de cuadras del Karlzplatz, una especie de highstreet ideal para el shopping, donde al final está Marienplatz, la plaza principal de la ciudad. También, tiene varios biergartens a su alrededor, como el Park Café (que está prácticamente enfrente) y el Augustinebrau (ideal si es que vas en las fechas del Oktoberfest). El transporte público está a la vuelta de la esquina para llegar a donde necesites.
El restaurante Sophia’s es una joya de la ciudad
Su restaurante fue recientemente remodelado y ahora es un hot spot imperdible de la escena gastronómica de la ciudad. El menú está a cargo del chef Michael Hüsken, en el que ofrece platillos con ingredientes de temporada. Nosotros probamos el menú degustación de comida, ¡y nos encantó! Todo fue a base de espárragos porque en junio es temporda. También sirven desayuno y cenas. Y su patio rodeado de árboles es como un oasis en medio de la ciudad. Es perfecto para una noche de date o para alguna junta de negocios.
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La terraza es el spot para cenar y relajarse
Aunque es parte del restaurante Sophia’s, quisimos destacar la terraza como otra razón más por el ambiente tan agradable que ofrece. No importa si vas a comer al restaurante, si vas a tener una reunión de negocios o simplemente quieres tomar una limonada, al sentarte aquí parece como si estuvieras en un oasis de naturaleza en medio de la ciudad. Es un spot ideal para ir con la pareja, amigos o hasta en familia. Incluso, si estás solo o con tu computadora, será un momento renovador durante tu viaje.
El spa es de los mejores de Múnich
Parte de la experiencia de visitar una ciudad tan avanzada como Múnich es conocer los servicios de bienestar que ofrece. Por eso, una visita al spa de The Charles es obligada. Ahí te consienten desde el momento en el que entras con un shake especialmente diseñado para complementar el tratamiento que vayas a recibir. Una vez dentro de la cabina, la terapeutra te dará instrucciones y preguntará si la música es la adecuada y cuál es tu aceite esencial favorito. Con esto, la experiencia se complementará para ser extraordinaria. Nuestra recomendación es reservar en la tarde para salir de ahí e irse directo a descansar. Saldrás tan relajado que al día siguiente despertarás como nuevo.
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Tiene una vista incomparable
Asegúrate que tu habitación esté en el 5to o 6to piso. No importa si es regular o suite, esos niveles tienen las mejores vistas del Jardín Botánico y los edificios próximos. Regresar de un día de paseo, hacerte un café y tomártelo en el balcón es la mejor forma de cerrar tus días en Múnich.
La habitación se volverá tu hogar
La cama, el baño, el balcón. Al final de tu viaje te garantizamos que no te querrás ir. Tu habitación se volverá parte de tus recuerdos en Múnich gracias a la comodidad de cada uno de sus rincones.
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