Cuando le ponemos intención a las cosas, toman un curso completamente diferente y más enriquecedor. No importa si es una situación desagradable, una lección por aprender o simplemente días por vivir en rutina. Estamos viviendo tiempos muy raros y hemos decidido comenzar a ponerle una intención a cada mes para practicar y ejercitar intenciones que pueden hacernos más ligero el viaje y vivir más tranquilos. La intención del mes: paciencia.
Sí, todos sabemos que “la paciencia es una virtud”, pero ¿por qué es bueno cultivar más? ¿Para qué sirve ser más paciente? ¿Qué puede enseñarnos? Hay muchas cosas que suceden en nuestras vidas y en el mundo en general que simplemente no podemos controlar, por más que queramos. Es importante practicarla, hacerla una intención y ver cómo podemos transformarnos a través de esta práctica.
La paciencia nos ayuda a aterrizar. Nos recuerda que incluso si somos infinitamente poderosos y creativos, no tenemos el control de absolutamente nada. Sí, hay que trabajar por nuestras metas y buscar manifestar lo que queremos y soñamos, pero debemos siempre recordar que no siempre será en los términos y tiempos que nosotros decidimos. Al practicar esta intención, podemos aprender a rendirnos y confiar en que las cosas sucederán sin intentar forzarlas. Esta puede ser una lección de humildad pero sobre todo, liberadora.
Otro regalo de practicar la paciencia, puede ser el control de nuestra mente. Nuestra mente quiere que el mundo se mueva tan rápido como nosotros, y la paciencia nos enseña a bajar la velocidad. Nos ayuda a no quedarnos atrapados en la inmediatez de los deseos de nuestra mente y mejor dar un paso atrás y simplemente observarlas. Ése es un poderoso ejercicio que puede ayudarnos a vivir más presentes y sin urgencia de que llegue el futuro.
Por último, la paciencia puede ayudarnos a entender que nuestras ideas y tiempos no siempre son ideales o la única forma. Esta intención para el mes nos podrá enseñar a ir con la corriente y ser más flexibles. Si podemos hacer eso, podemos aprender a ser felices, sean cuales sean los cambios de planes o situaciones que nos sucedan en la vida. ¿Estás con nosotros para practicarlo durante febrero?
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