Aunque el año está por acabar, aún estamos a tiempo de honrar a los discos que cumplen 10 años y se convierten, en cierta medida, en clásicos. Aunque la distinción temporal que otorga una década tal vez no definiría a un clásico, estos discos definitivamente han tenido una influencia importante en la música que vino después.
El inicio de la década pasada estaba dejando atrás la música emo (que transitaría al metalcore y otros géneros), el reaggeton se fusionaba mucho más con el trap y el mundo comenzaba a escuchar algo llamado dubstep, que pesaríamos que iba a dominar el resto de la década. Las cosas no siempre suceden como lo creemos, pero sin duda, estos discos sí pasaron la prueba del tiempo.
Gorillaz – Plastic Beach
Los primeros discos de Gorillaz los catapultaron al estrellato, pero Plastic Beach terminó de definir el concepto de la banda virtual como uno de los mejores shows del mundo análogo y digital.
Arcade Fire – The Suburbs
En ese entonces Arcade Fire ya era vendida como la mejor banda de rock del momento, y los que lo decían tenían buenas razones. El grupo (que parece más una orquesta cuando está en el escenario) saltó a un sonido mucho más amigable para este disco pero sin perder de vista sus puntos existencialistas que sirvieron para colarse en la lista de los mejores discos del año.
Robyn – Body Talk
Robyn hizo por el pop lo que muchos artistas habían intentado y no lograban. Demostró que a pesar de que el sonido puede ser amigable, el concepto puede ser mucho más íntimo e introspectivo de lo que pensamos.
The Black Keys – Brothers
Con un sonido entre el garage y el blues, la banda demostró que el rock estaba lejos de morir y que incluso en el siglo XXI podía sonar un rock crudo y original.
Tame Impala – InnerSpeaker
A diferencia de The Balck Keys, Kevin Parker llevó al rock a una nueva etapa, Innerspeaker fue su carta de presentación al mundo y 10 años después son pocos los personajes que han cambiado tanto la música contemporánea como él.
Janelle Monáe – The ArchAndroid
Un año antes de saltar a la fama mundial con We Are Young junto a Fun, Janelle Monáe publicó este disco conceptual en el que el afrofuturismo y la ciencia ficción se mezclan con un R&B alternativo que no ha podido ser igualado en 10 años.
LCD Soundsystem – This is Happening
Con un disco que funcionaba como despedida, James Murphy volvió a hacer un disco que a pesar de que se cataloga en el rock alternativo o el post punk, es muy difícil de categorizar. Con canciones cuya media son los siete minutos, los anti hits de la banda son un clásico de culto.
Kanye West – My Beautiful Dark Twisted Fantasy
Kanye West será un ícono de la cultura popular y uno de los hombres más mediáticos del siglo XXI, pero pensándolo como un músico y nada más, esta es su obra maestra. Una reflexión sobre su personalidad, una disculpa y una prerrogativa, todo en uno de los mejores álbumes, no del 2010, ni de la década, sino de todos los tiempos.