Nappily Ever After es una película original de Netflix que se estrenó hace poco, su protagonista es Violet (Sanaa Lathan), una mujer de raza negra que ha vivido todos sus días obsesionada con la apariencia de su pelo debido a que desde pequeña su madre siempre le hizo creer que tenerlo lacio y largo era cómo debía tenerlo para verse “bonita”. Situaciones de la vida hicieron que Violet logre darse cuenta que ha vivido intentando ser alguien que no es y lucha por liberarse de cualquier estereotipo de belleza.
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Aunque trata en general sobre el pelo afroamericano y todas las “complicaciones” que sufren las personas de raza negra para intentar acercarse a la “perfección”, tiene importantes lecciones que encajan con cualquiera de nosotros. Estas fueron algunas de las que aprendimos luego de ver la película ¿coincides con nosotros?
Las opiniones negativas no son tu realidad.
La gente siempre opinará sobre ti y sobre todo lo que tenga en frente, sin embargo es necesario tener muy en cuenta que la verdadera construcción de la persona que eres depende de ti y de nadie más. Aunque la sociedad tiene marcados muchos estereotipos respecto a la belleza, día con día hay gente que lucha por salir de esa idea cuadrada y aceptar que todos somos perfectos como seres humanos únicos.
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La belleza natural siempre será tu mejor aliada.
Claro que a todos nos gusta ayudarnos a ver “mejor” con miles de servicios y productos que prometen cambiar nuestra apariencia física por completo, aunque se vale utilizarlos, no es bueno depender totalmente de ellos, pues tu esencia y encanto natural es lo que realmente cautivará a cualquier otra persona y en cualquier momento del día/vida.
El amor aceptará la persona que realmente eres.
No debes forzarte a cambiar tu esencia como persona, ni apariencia física para lograr cautivar a nadie. Aunque suene cursi, la persona que te ame te amará tal como eres, con cabello largo o corto, lacio o rizado, delgado o con kilos de más, siempre debe ser así pues lo verdaderamente importante es tu “yo interior”.
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Dejemos los estereotipos a un lado.
Esa clase de “belleza” que vemos en la mayoría de los anuncios publicitarios y televisión no es real, detrás de esa sonrisa o peinado perfecto, hubo varias pruebas, errores y ediciones. Aprendamos a ser mucho más naturales que además de hacernos sentir cómodos nos hará cambiar la perspectiva de muchos aspectos de la vida. Sácale partido a las características con las que naciste.
Escoge ser feliz por sobre todas las cosas.
Nada de lo que hagas te hará ser feliz si no lo disfrutas. Elige siempre todo aquello que te haga sentir bien contigo misma para poder compartir tu felicidad con todos los que te rodean.
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