Lo sabemos, muchos de nosotros nos sorprendimos cuando escuchamos que Kendrick Lamar había sido elegido ganador de un Pulitzer, pues no es uno de los artistas que podríamos relacionar con este tipo de premio. Sin embargo, la calidad, honestidad y gran letra que tienen sus canciones lo hicieron convertirse en el candidato perfecto y en ‘el mejor rapero vivo del mundo’.
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Aunque podría pensarse que Lamar cambió la historia y fue el primer cantante en ganar un Pulitzer, la realidad es que esto pasó por primera vez en 1943 con William Schuman, seguido por Ornette Coleman y Henry Threadgill, ambos dedicados a crear jazz.
Pero, ¿por qué seleccionar a Lamar como ganador? Lo cierto es que influyen varios factores. En primer lugar, lo toma como una reivindicación del hip-hop. La placa de Pulitzer describió el trabajo de Kendrick como “una colección de canciones virtuosas, unificadas por su autenticidad y dinamismo rítmico que ofrece viñetas que capturan la complejidad de la vida afroamericana moderna”.
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Además, se ha posicionado como un básico dentro de la cultura de entretenimiento americana y actualmente disfruta una racha de éxito comercial y crítico. Fuera de su fama, los jueces consideran que el trabajo de composición de ‘DAMN’ es acreedor 100% de este premio aunque muchos piensen que éste género musical es solo ruido.
Además, esto lo convierte en un narrador vívido e impredecible, porque sus letras contienen multitudes, así como la parte técnica que utiliza para crear más claridad, complejidad y honestidad. En pocas palabras, Lamar se convirtió en ganador de un Pulitzer gracias a la pureza lírica que hay en sus canciones. Orgulloso y convencido que será el primero de muchos, el cantante no se detendrá y seguirá su carrera para cosechar más éxitos.
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