Jimmy Hendrix ya no tiene la notoriedad que ostentaba hace unas décadas. El guitarrista que prendió en fuego su guitarra, que supuestamente mojaba su paliacate en ácido lisérgico para siempre estar bajo sus efectos, que hizo de Woodstock el evento más importante en la historia de la música, hoy parece más un tema en la historia del rock que un artista que puedes escuchar en cualquier momento.
Su sonido es esencial para cualquiera que escuche rock e incluso pop actual, y con una carrera que duró sólo cuatro años, es inverosímil que una cultura que aprecia a las estrellas que, en palabras de Kurt Cobain, consideran que es mejor quemarse en lugar de apagarse lentamente, no lo mantenga como una referencia a la cual acudir constantemente.
Jimmy Hendrix comenzó a tocar guitarra a los 15 años, poco tiempo después fue parte de la banda de Little Richard y al mudarse a Inglaterra descubrió la fama, pero no por error, sino porque era un verdadero prodigio de la guitarra. A diferencia de muchos músicos que se fueron antes de tiempo y que nos dejaron pensando de qué habrían sido capaces de haber seguido entre nosotros por muchos años más, Hendrix no dejó esa duda, él ya había cambiado el rumbo de la música y sin duda habría hecho mucho más de no haber muerto accidentalmente en 1970.
Esta playlist reúne las canciones esenciales, pero también esas canciones que demuestran que Hendrix siempre mantuvo el estándar de perfección en cada una de sus composiciones y que sin duda deberías escuchar mucho más seguido. Tal vez no son las más populares, pero tienen una esencia que te va a encantar de cada una de ellas.