El estudio Basalt Architects completaron el hotel dentro del Blue Lagoon Resort en Islandia, un resort que te dará vistas a un lago color turquesa del famoso lago que tiene formaciones de lava y ahí es donde se construyeron las habitaciones.
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Blue Lagoon se encuentra dentro del Geoparque Mundial de la UNESCO y comprende una serie de piscinas que contienen agua de mar geotérmica, rica en minerales como la sílice y el azufre que tienen fama de ser buenos para tratar las enfermedades de la piel.
El original Blue Lagoon Spa, el subsiguiente hotel Silica y otras extensiones de las instalaciones de Blue Lagoon fueron diseñadas por Sigríður Sigþórsdóttir, socio fundador de Basalt Architects. Sigurður Þorsteinsson y Design Group Italia, colaboraron con Basalt Architects en el Retreat at Blue Lagoon.
El nuevo hotel representa la culminación de la visión del fundador Grímur Sæmundsen de Blue Lagoon como epicentro de la salud y el bienestar. El diseño del retiro tiene como objetivo aprovechar la belleza natural de la laguna y minimizar el impacto del edificio en su entorno. Un análisis completo de las grietas y fisuras que forman este paisaje volcánico permitieron el diseño que este complejo.
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También se incorporó un grado de flexibilidad en el diseño para permitir que el plan se adaptara en respuesta a descubrimientos inesperados durante el proceso de excavación. Como resultado, el edificio se fusiona perfectamente con el entorno e incorpora algunas de las características naturales. Detalles de lava, musco y agua son los dominantes en el completo entretejido con estos elementos naturales.
La lava desnuda forma las paredes dentro y fuera y cubre los techos. El agua rodea, fluye y cae en cascada, y el exuberante musgo se extiende hasta el horizonte. Son parte de la decoración que hacen inigualable este complejo. La paleta de materiales utilizada durante todo el proyecto se eligió para complementar los matices y las texturas del paisaje, con hormigón en bruto, madera y lava del sitio, todos utilizados para armonizar en conjunto.
La estructura predominantemente de hormigón comprende elementos que fueron prefabricados o moldeados in situ. El concreto expuesto se trató para crear paredes con diferentes texturas y tonos que evocan la sílice blanca o la lava gris. Las fachadas y pantallas personalizadas dentro del spa y el hotel tienen un tono gris oscuro y un patrón perforado que recuerda la superficie aireada de la roca ígnea solidificada.
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Las 62 suites presentan una estética minimalista, con ventanas del piso al techo que centran la atención en las vistas a la laguna o las rocas cubiertas de musgo. La lava se usa en diversas formas en todo el interior para formar superficies y objetos que enraizan el edificio en su contexto. Estos incluyen mostradores de servicio en el área de recepción y una mesa de chef en el nuevo Moss Restaurant hecho de roca de lava que fue extraída en el sitio.
Una bodega para el restaurante está rodeada por paredes de roca expuesta que se iluminan dramáticamente desde abajo, con luces colgantes adicionales que contribuyen al ambiente tenue.
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