Cuando vives en una ciudad como la CDMX, sabes que tienes que salir con capas. En una esquina te estás congelando en la sombra en la mañana, a medio día no soportas el calor y en la tarde la lluvia y el viento hacen que desees vivir en la playa.
Lee también: Tips para lavar tus jeans y mantenerlos como nuevos por más tiempo
A pesar de décadas de innovación en telas con propiedades térmicas de alta tecnología que mantienen frescos a los corredores en un maratón o calientes a los excursionistas en la montaña, no existe un material que cambie sus propiedades en respuesta al ambiente. Hasta ahora.
En la Universidad de Maryland están trabajando un nuevo tejido que se adapta a la temperatura. La idea es que la tela cambia automáticamente de acuerdo con el medio ambiente gracias a un hilo especialmente diseñado cubierto con nanotubos de carbono.
Lee también: La ropa biodegradable ya es una realidad
El hilo se expande y contrae en función del calor y la humedad, lo que cambia el espacio entre las fibras. Si la tela está cerca de las condiciones cálidas y húmedas, como un cuerpo sudado, las fibras se abren y dejan pasar el calor. En condiciones más frías y secas, el tejido reduce el calor que se escapa, al encogerse.
“El cuerpo humano es un radiador perfecto. Emite calor rápidamente”, dice Min Ouyang, de la UMD. “Siempre, la única forma de regular el radiador (cuerpo) ha sido quitarse la ropa o ponerse la ropa. Pero esta tela es un verdadero regulador bidireccional”.
Debe estar conectado para enviar un comentario.