La muerte de Carrie Fisher es un recordatorio de que podemos lograr vivir una vida inspirando a otros a ser mejores y terminar siendo inmortales al dejar huella en las personas y sus corazones. Seguramente muchos la recuerdan por su papel como la princesa Leia Organa en Star Wars dejando todo un legado en la cultura pop.
Más allá de ella como actriz o escritora, es hablar de Carrie Fisher como una mujer empoderada que nos dejo muchas lecciones de vida al paso de los años. Una mujer que ha inspirado a muchas generaciones a creer en ellos mismos y les enseñó que cualquiera tiene las capacidades de cumplir sus sueños y conectar con su ser de una manera humana y divertida. Te compartimos algunas lecciones de vida de esta actriz.
La vida tiene que ser divertida
Carrie Fisher una vez dijo: “Si mi vida no fuera graciosa, sería real. Y eso es algo completamente inaceptable”. Siempre fue una mujer que veía la vida con humor y se reía de ella misma y haciendo que reírse de uno mismo sea un pilar de su resiliencia como mujer al verlo como algo normal y de lo que no se deben preocupar las personas.
La fuerza siempre nos acompaña
Al interpretar a la princesa Leia, siempre demostró su fortaleza y la importancia de la fuerza interior para afrontar los pequeños y grandes retos de la vida. No se trata de temer sino de hacerle cara a todo. Carrie Fisher siempre hablaba de la importancia que tiene el arriesgarse aunque cometamos errores.
Normalizar la salud mental
Al enfrentarse desde muy pequeña a grandes cambios, fue diagnosticada con un trastorno bipolar a los 24 años. Incluso era una persona que fomentaba ver la salud mental cómo algo de lo que se tiene que hablar. “Una de las cosas que más me sorprende es la cantidad de fuertes estigmas que hay hacia las enfermedades mentales, especialmente hacia el trastorno bipolar. En mi opinión, para vivir con depresión maníaca hay que tener coraje. A veces, ser bipolar es un reto agotador que requiere mucho aguante e incluso más coraje, así que, si estás viviendo con esta enfermedad, es algo de lo que estar orgulloso, no avergonzado. Deberían darte una medalla”.
Darle importancia a nuestras emociones
Carrie Fisher ponía como prioridad dejarse experimentar toda clase de emociones ya que eso nos hace humanos. Sentir es una señal de que estamos vivos y ella lo tenía muy presente. Ella dijo un día “Mi consuelo no era lo más importante, lo era mi paso al otro lado de esos difíciles sentimientos”, haciendo reflexión que por más difíciles que sean algunos días, todo pasa y todo sana. Todo visto de una manera de sentirnos cómodos con eso que nos incomoda de nuestras emociones.
La vida puede ser muy compleja
Una frase muy recordada en su libro “Wishful Drinking”, es en la que habla un poco sobre sus momentos en los que tuvo algunas caídas y se sentía en la mira de todo. “Ningún motivo es puro. Nadie es bueno o malo, sino una sana mezcla de ambas cosas. Y, a veces, la vida te da algo cuando te lo quita”, en esa frase habla mucho de que siempre hay un equilibrio y el ver matices es mejor que dejarse caer con momentos muy grises o muy felices.
El físico no importa
Carrie Fisher siempre se ha encargado de empoderar a las mujeres y muchas veces hacía comentarios de manera divertida pero segura de sí misma en la que hablaba del físico: “Me identifico más con cómo me siento que con qué aspecto ofrezco”, haciendo que quede claro que los comentarios sobre su aspecto no le importaban. Ella se enfocaba en estar bien consigo misma y punto.
Estos son tan solo algunos de los momentos en los que Carrie Fisher nos demostró que es una mujer poderosa que siempre estará en nuestros corazones inspirándonos. Si quieres conocer un poco más, te dejamos el enlace de su libro para que te llenes de lecciones de vida y superación al estilo de la princesa más querida por la galaxia.
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