No nos cabe duda, si tienes mascota, esta se ha convertido en un miembro más de la familia. Ya no resulta extraño que los peludines pasen mucho más tiempo dentro de casa, que en el patio, azotea o balcón. Como en la ciudad muchos han optado por vivir en departamentos, lo más común es elegir razas pequeñas para que se sientan más cómodos.
A continuación compartiremos contigo algunas opciones que puedes tomar en cuenta para que el espacio en tu departamento sea apto para motivar su desarrollo, convivencia y crecimiento.
Muebles empotrables para ahorrar espacio
Los trinchadores, centros de entretenimiento, mesas de estudio/trabajo, o lavabos de baño, son la mejor opción para ahorrar espacio en el piso. Además, facilitan mucho su limpieza y dejan fuera del alcance cualquier objetos que pueda morder. Hay perros que encuentran entre el mueble y el piso, un lugar “seguro” o “cálido” para tomar la siesta.
Que nunca falte espacio para disfrutar su comida
Asígnale un lugar muy bien aseado y ventilado. Tu perro comerá disfrutando con tranquilidad hasta el último bocado, sin distracciones y en un ambiente limpio. Quizás el balcón o terraza funcionen, pero revisa el flujo de polvo o smog que se perciba del exterior.
Opta por pisos cerámicos
El piso cerámico es la opción más práctica para los interiores de tu departamento. Son fáciles de limpiar ante cualquier eventualidad o mala jugada que haga el esfínter de tu perro. Lo mejor es que existen diseños de todo tipo que harán lucir increíble los espacios del hogar.
Ilumina y usa colores claros.
Si tu amigo se queda solo un buen rato, el estar en un espacio amplio y bien iluminado lo mantendrá con buen estado de humor y hará más leve su espera a tu regreso. Elige colores claros en tus paredes para optimizar el flujo de luz que entra en tu hogar durante el día, además ayudarán a que el espacio se vea mucho más amplio. Sumas iluminación con luz blanca, para maximizar esta percepción.
Utiliza la pintura ideal.
Existen opciones de pintura lavables, no tóxicas, libres de plomo, en tono mate y que inhiben el crecimiento de bacterias que puedan ser dañinas para tu compañero. No solo acondicionarás un espacio ideal para que tu perro disfrute cada bocado de su comida, sino que también crearás un ambiente más cómodo para su vida diaria.
Delimita su espacio.
Protege tus muebles y delimita su espacio en zonas donde no quieres que tu perro transite cuando no estés en casa. Además, debes armarte de paciencia para poco a poco enseñarle dónde debe hacer sus necesidades.
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