Desde antes de que Porsche comenzara a fabricar automóviles, ya era sinónimo de excelencia. Ellos fueron los que dieron consultoría en parte responsables por el automóvil más popular de la historia, el Volkswagen Beetle.
Desde entonces, Porsche ha buscado en la innovación y la tecnología, la manera de fabricar los mejores autos a nivel mundial. Al inicio de la tercera década del siglo XXI, finalmente hacen el gran salto a los motores eléctricos con el nuevo Taycan. Ahora que ha recorrido las calles y ha sido puesto a prueba, estas son tres cosas en las que destaca y por lo que se posiciona como uno de los mejores autos eléctricos del mundo.
Ensamblaje
Hay tres cosas que distinguen a Porsche sobre los otros autos: pureza, expresión y la atemporalidad, y el Taycan cumple con todo. El diseño deportivo del modelo lo hace ver como una flecha que utiliza todo el potencial aerodinámico para atravesar una carretera a toda velocidad. Sin embargo, los expertos admiran el ensamblaje de Taycan. Mientras otros autos se ven más “industrializados”, este muestra una especie de orfebrería digno de una verdadera joya.
Performance
Taycan representa un quiebre con la tradición de Porsche al ser completamente eléctrico, y muchos pensaban que eso iba a afectar negativamente la experiencia de manejo del auto, pero en realidad sólo la mejoró. Porsche no es un juguete y nada más, por lo que manejarlo requiere manos que sepan lo que tienen frente a ellos, y nuevamente los expertos aceptan que a pesar de ser exigente –como cualquier Porsche– al mantenerlo a 90 km/h, conducir se convierte en una experiencia única.
Aceleración
La velocidad lo es todo para los amantes de Porsche y aunque tal vez no se trata del automóvil más veloz de la marca, no pierde el estándar de excelencia que siempre ha buscado. Tal vez Taycan aún puede mejorar, sobre todo en la parte de carga, pero sin duda ha logrado mostrar lo que una firma tan exclusiva como Porsche puede hacer por el futuro del automovilismo.
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