Las piñas son una fruta maravillosa, y más allá de que nos encanta el sabor, son increíbles para la piel. Beber, comer y aplicar tópicamente jugo de piña de forma regular es una forma poderosa y comprobada de lograr una piel clara y radiante.
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Las vitaminas en esta frutas incluyen vitamina A, vitamina C, betacaroteno, tiamina, vitamina B5 (ácido pantoténico), vitamina B6 y ácido fólico. Minerales como el potasio, cobre, manganeso, calcio, sodio y magnesio también se encuentran en las piñas.
Úsala para minimizar las manchas. El ácido ascórbico (vitamina C) en las piñas ayuda a desvanecer cicatrices y manchas oscuras. Las enzimas descomponen las células muertas de la piel en las manchas oscuras. Sólo aplica un poco de jugo de piña en los puntos oscuros con un algodón, déjalo actuar durante cinco minutos y enjuaga con agua tibia.
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Y para exfoliar la piel. Las piñas son el exfoliante natural perfecto. Son ricas en AHAs (ácidos alfa hidroxi) que exfolian las células muertas de la piel. El extracto de piña contiene enzimas de la fruta (enzimas proteolíticas de las plantas) que eliminan las células muertas y aclaran la piel.
Mejorará la complexión de tu piel. El jugo de piña también está cargado con una enzima conocida como bromelina. Si sufres de acné, beberlo te puede ayudar a reducir la inflamación crónica, que es la condición más importante detrás del acné.
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