Muchos pueden creer que San Valentín sólo se trata de encontrar el regalo más costoso para demostrar amor, no hay nada más lejano de la realidad.
Aunque el día sí comenzó con fines comerciales, se ha instaurado tanto en nuestro imaginario que realmente se trata de una oportunidad para crear algo único en pareja.
Por eso es que una cena siempre es un gran plan para ese día, pero además de ir al mejor restaurante de tu ciudad, o al más romántico o al que esté de moda, preparar la cena para tu pareja es quizá la mejor idea.
Planifica
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Si harás una cena, no lo dejes todo para el final. Piensa lo que necesitas comprar, lo que quieres hacer y cómpralo con anticipación. No dejes nada al azar, se trata de una noche perfecta y debes adelantarte a cualquier inconveniente.
Genera un ambiente
Si la cena será en la casa de alguno de los dos, en el hogar que comparten o en un sitio familiar, debes hacer que se vea especial. No es necesario que parezca un restaurante, no que todo sea rojo y meloso, pero sí puedes hacer que el lugar tenga un mood que signifique algo para los dos. Recuerda que la iluminación siempre es tu gran aliada.
La bebida es igual de importante que la comida
No dejes pasar la oportunidad de sorprender a tu pareja con una cena que tenga un maridaje. Iniciar con una tabla de quesos es la oportunidad perfecta de abrir un vino, pasar a la cena implica cambiar de botella y dependiendo las entradas, puedes repetir el proceso. El maridaje es algo que hace de tu cena algo mucho más especial y te hará quedar como todo un experto.
Supérate a ti mismo
Si no tienes nada de experiencia en la cocina, cocinar algo ya será una gran sorpresa, pero dependiendo tus habilidades, siempre intenta preparar algo un poco más complejo para que tu pareja quede realmente sorprendida, pero tampoco algo que sea imposible para ti para que no arruines la cena de San Valentín para los dos. Hay una delgada línea de platillos que puedes hacer, pero todo depende de tu preparación.
Prepara otra sorpresa
Si sorprendes a la persona que amas con una cena, te lo agradecerá por siempre, pero no hay nada como tener otro elemento sorpresa para terminar de hacer la velada perfecta.