Después de unos discos con críticas bastante tibias, The Killers regresó en 2020 con Imploding the Mirage, su sexto disco de estudio y la muestra de que una banda, a pesar de todas las críticas, puede regresar con una verdadera sorpresa. Tan solo un año después, la banda de Las Vegas regresa con un nuevo disco, Pressure Machine.
Si bien el disco anterior fue un parteaguas en su carrera (huyeron de Las Vegas y fue el primer disco sin Dave Keuning, miembro fundador del grupo), este se trata de un viaje a sus raíces. Keuning está de vuelta listo para darle más guitarras a este disco que en realidad es un trabajo conceptual de Brandon Flowers sobre su infancia creciendo en Utah (de nuevo nos alejamos de Las Vegas).
El disco no habría existido si no fuera por la pandemia. Durante 2020 The Killers terminaron de grabar Imploding the Mirage, pero desde su lanzamiento sabían que era imposible una gira mundial (irónicamente, el lugar donde más brilla la banda es en el escenario), por lo que después de una rueda de prensa virtual, la banda se encontró en el mismo lugar y en lugar de tomar un descanso, decidieron poner manos a la obra en un nuevo disco.
Este disco debe ser mucho más sombrío y nostálgico que Imploding the Mirage, pero no por eso perder la esencia de The Killers y esperemos que viva a la expectativa después de su último lanzamiento. Con la colaboración de Phoebe Bridgers en Runaway Horses y con el imaginario de un cuento de John Steinbeck alrededor del disco, no podemos esperar menos.