El movimiento bien podría ser sinónimo de naturaleza. Desde el agua hasta las piedras y montañas, todo está en movimiento (aunque algo sea inmediato y otras cosas tomen miles o millones de años en transfomarse), y por su puesto, nosotros somos movimiento.
Nuestra existencia se basa en lo que hacemos, el movimiento y nuestras acciones, es a partir de ellas que encontramos sentido y generamos acción. Entonces, ¿por qué cada vez nos movemos menos?
El siglo XXI, con la hiperconectividad en el mundo entero nos trajo una maldición, el sedentarismo. Cada vez son más las personas que trabajan frente a una computadora más de ocho horas y que después van a un sillón a ver televisión o revisar su smartphone. Según algunos estudios, esto nos está matando lentamente.
De hecho, ahora hay un movimiento por el movimiento. Más allá de una nueva forma de ejercitarse, es replantearnos todo lo que hacemos en nuestro día a día. La rutina parece inamovible, pero realmente podemos agregar mucho más movimiento a nuestras actividades. Katy Bowman, entrenadora y experta en biomecánica, es una de las principales figuras frente a esta iniciativa.
Según ella, podemos hacer ejercicio por 30 minutos o una hora, pero sirve de poco (a largo plazo) si pasamos el resto del día sentados o acostados. Piénsalo de esta manera, mucha gente despierta, maneja al gimnasio y hace una rutina que le exige el máximo por 40 minutos, después se baña y maneja a su trabajo, donde pasa el resto del día sentado, maneja a su casa y se sienta frente a la tele para después acostarse y terminar el día. Viéndolo de esa manera, parece que el ejercicio no rindió frutos.
Entre las enseñanzas o recomendaciones de Katy está el sacar los sillones y las sillas altas de la casa, tener pasamanos dentro del hogar o en el jardín y siempre estar en movimiento, incluso al sentarte a leer un libro puedes moverte, mientras no quedes inerte en una sola posición.
Se estima que al mantener el cuerpo en movimiento a lo largo del día, se puede reducir el riesgo de una muerte prematura hasta en un 35 %. Así que si estos días estás en casa y sientes que una hora de ejercicio no te basta, puede que tengas razón. No necesitas cambiar tu vida radicalmente, sólo necesitas incluir más movimiento en ella.
Cambia tu rutina, reacomoda las cosas en tu casa para que tengas que moverte más al querer agarrar cosas esenciales, no trabajes sentado todo el día (párate, camina, estírate y mucho más). En esencia, sé mucho más consiente de tu cuerpo y aprende a moverte todo el tiempo.
Debe estar conectado para enviar un comentario.