Es muy importante recordar y tomar conciencia de lo interconectados que estamos con la naturaleza. Una forma de hacerlo es estar en contacto directo con ella y también podemos honrarla durante una práctica de yoga. Existen secuencias de yoga que nos ayudarán a sentir con nuestro corazón y no solo con nuestra mente que cada respiración es un intercambio íntimo con el cielo, los árboles, el mar y los animales. En el yoga se cree que cuando honramos a la naturaleza ella nos honra de regreso.
Alrededor del 30 al 40 por ciento de las poses de diferentes secuencias de yoga tienen nombres de animales, por lo que la conexión con la naturaleza era algo inherente para los yoguis. Las secuencias más lentas y sáttvicas son las mejores, en las que podemos enfocarnos en la respiración y meditar sobre el honor de estar aquí conectando con la naturaleza. Fortalece tu relación con lo natural y contigo mismo al paracticar estas simples secuencias.
Surya Namaskar
El clásico y básico saludo al sol es clave. Cuando hacemos un saludo al sol, el sol hace un saludo hacia nosotros y nos honramos mutuamente. Idealmente se hace al amanecer, para recibirlo, pero en realidad puedes hacerlo en cualquier momento del día. Lo que importa es la intención. Aquí hablamos sobre los beneficios de hacer Surya Namaskar diario.
Trianga Mukhaikapada Paschimottanasana
Paschimottanasana es una postura restaurativa y que termina en el piso conectando con el cuerpo y la tierra. Esta secuencia es para lograr “peak pose” que es una combinación entre Paschimottanasana y Virasana. Requiere de que comiences con unos saludos al sol para calentar y un poco de flexibilidad.
Chandra Namaskar
Así como tenemos el saludo al sol, tenemos el saludo a la luna. Su objetivo, además de saludar a la luna, es relajarte y entrar en un estado de calma. Entre sus beneficios, esta secuencia te ayuda a calmar los nervios, a coordinarte y a entrar en un estado de calma perfecto para meditar o irte a dormir.
Pranayama y Savasana
Savasana es de las posturas más naturales que hay. Mientras que para muchos puede parecer sólo acostarse en el piso, es una postura muy poderosa para integrar, respirar, descansar y conectar con la Tierra y la naturaleza. Complementa esta secuencia el Savasana con Pranayama y honra el aire, la energía y la luz.