Primo del Kentucky Mule, el Moscow Mule es una gran opción para tomar en cualquier época del año para quienes gustan de tomar vodka. Helado con un toque de jengibre picante, la buena noticia es que también es extremadamente fácil de hacer.
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A pesar de su nombre e ingrediente principal, este drink no proviene de Rusia. Es un cóctel americano de sangre roja, que se preparó en Manhattan en 1941 por tres hombres de la industria de las bebidas: un distribuidor, otro fabricante de cerveza de jengibre y otro fabricante de vodka.
Se preguntaron qué podría suceder al agregar dos shots de vodka a una cerveza de jengibre y un chorrito de lima. Sabía bien. Así es como nació y se ganó el nombre por su ubicación en el Hotel Chatham, el lugar de nacimiento de “Little Moscow”… O eso dice la leyenda. La historia más probable es que Wes Price, barman principal en el restaurante Cock’n Bull en Los Ángeles, lo inventó al tratar de limpiar algunas cosas del sótano del restaurante.
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De cualquier manera, es una bebida que, con su taza de cobre, se ha vuelto extremadamente popular en los últimos años. Hazlo en la taza si quieres tener todo el conjunto, o sírvela en un vaso normal. Es atemporal y delicioso. ¡Aquí tienes la receta!
Ingredientes:
– 2 oz de vodka
– 1/2 oz de jugo de limón
– 6 oz de cerveza de jengibre
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Instrucciones:
1. Exprime el limón en la taza o vaso y déjalo dentro.
2. Agrega dos o tres cubos de hielo. Agrega el vodka y sirve la cerveza de jengibre (no es un ginger ale o algo similar).
3. Revuelve un poco y sirve.
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