Por Melissa Suárez
Por mucho tiempo las mesas redondas fueron las obligadas en la decoración de todo banquete de bodas; sin embargo la geometría hizo de las suyas y nos regalo una pieza de mobiliario que, hasta el momento, se ha convertido en una de las predilectas de los novios mexicanos. Las mesas rectangulares, por fortuna, también han llegado para conquistar el terreno nupcial y, créeme, ¡me fascina la idea! A pesar de los años en los que ya han tenido presencia, la realidad es que cada vez existen más y más formas de decorarlas y de armar propuestas encantadoras para que tú y todos los invitados queden fascinados con la ambientación. Acá te cuento más sobre cómo usarlas para el gran día.
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¿Sabes qué es lo que más me gusta? La versatilidad de las mesas rectangulares o imperiales. Estas las puedes encontrar en todo tipo de texturas (madera, mármol, you name it), y también las puedes decorar con diversos detalles, como: manteles de terciopelo, caminos de mesa, servilletas, centros de mesa de ensueño y una combinación de sillas que podrán tener estilos diversos para generar una decoración ecléctica. El tema es aprovechar las miles de opciones que estas piezas de mobiliario te regalan y llevarlas al máximo para crear un entorno cálido, hermoso y en el que todos los asistentes puedan convivir y disfrutar del gran amor de los recién casados.
Las mesas rectangulares las puedes ocupar en un espacio al aire libre o en interiores; la ventaja de que tengan un contacto con la naturaleza más profundo es que podrás utilizar los mismos recursos del escenario para crear una decoración que no necesite demasiado producción. Además, si eliges un espacio abierto, seguro que podrás jugar con las texturas de madera de las mismas y podrás incorporar una gama de colores más interesantes en los montajes de las mesas. Si te gusta la idea, no dudes en apostar por decoraciones colgantes. La forma de las mesas te permitirá crear una gran producción con follajes, flores, velas y cientos de elementos.
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Una de las grandes ventajas de las mesas rectangulares es que los invitados podrán convivir más de cerca y con un mayor número de personas, algo que no era tan posible con las mesas redondas. Esto te permitirá romper con el protocolo y, por si fuera poco, crear una dinámica muy especial y cálida que, sin duda, todos disfrutarán. Ya sea que tengas una boda con muchos o pocos invitados, este tipo de mobiliario será perfecto para decorar el banquete y tener un ambiente increíble y lleno de buena vibra. Si apuestas por una boda íntima, entonces te propongo hacer una mayor inversión en los elementos que decoren los montajes con el fin de crear una propuesta creativa que deje a todos boquiabiertos.
Aunque no lo creas, las mesas rectangulares te permitirán jugar con una gama de colores más extensa, así como con distintos acentos. Te propongo apostar por vajillas que lleven diseños contrastantes, guirnaldas llenas de follajes, toques de dorado, velas, textiles y detalles personalizados para cada uno de los invitados. Si lo prefieres, siempre puedes apostar por un estilo más casual y elegante, en donde predominen los cristales, el color blanco y el minimalismo. Si quieres más ideas, recuerda que la decoración con geometría se ve espectacular, además de que siempre puedes apostar por el macramé y otros materiales para una tendencia bohemia.
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Este tipo de mesas tienen muchas ventajas, pero también algunos inconvenientes. Toma en cuenta que debes hacer una planificación muy acertada sobre los invitados y qué lugar ocuparán, ya que quienes estén sentados en los extremos pueden sentirse un poco relegados. El punto es que todos platiquen y se conozcan más, claro, pero es posible que a algunos les cueste más trabajo socializar; a ellos, ¡ponlos en medio! A los grupos más extrovertidos los puedes separar a lo largo de la mesa para que conquisten a los demás. ¿Qué te parece?
Nota originalmente publicada en ZankYou México