Estar bien contigo mismo es fundamental para que puedas estar bien con los demás. Aprender a decir no es primordial para una vida en la que puedas sentirte bien con tus elecciones y no hagas cosas por compromiso o por no querer lastimar a las personas que te rodean. No es fácil pero una vez que lo consigues se va convirtiendo en una sensación que no cambias por nada.
Una manera de comenzar este proceso de decir no viendo primero por ti que por los demás, es tomar en cuenta que vale la pena para ti y que no lo vale. Si partes desde ese punto es llevadero para ti porque sabes qué quieres y que no quieres aceptar. Una persona que esta segura de quien es y de lo que quiere puede convertirse en una mejor versión de sí misma sin lastimar a otros.
No te hace una persona egoísta
Muchas personas piensan que él decir no, es sinónimo de que eres una persona grosera. No es agradable que aceptes solo por sentir culpa o críticas de las personas que te rodean. Esta bien que ayudes o aceptes en algunas ocasiones pero si no te das tu valor ¿entonces quién lo hará? afronta cada elección que tomes con la idea de que sea siempre por tu bien pese que no para el otro. Ponte como prioridad.
Pon límites
Si eres alguien que al decir no, se siente con culpa, imagina cómo es tener que repetir un “NO” varias veces. No le permitas a tus pensamientos jugarte en contra. Se firme al decir no, ya que si dejas en un “tal vez” o un “no se” solo vas a alargar esa espera o sentimiento de incomodidad por no haberlo dicho cuando era tiempo. Pon límites a tus pensamientos, sé claro y puntual y notarás la diferencia.
Se firme a tus ideales
Si eres una persona que le cuesta decir no a las personas que te rodean entonces comienza practicando, si, así como lo oyes. Ponte frente al espejo y repite “no puedo” o “no, no lo haré” plantea situaciones que no te gustaría experimentar y aborda cada una de la mejor manera. Si no te hace sentir cómodo, no necesitas explicar o tratar de justificarte con nada solo aprende a no ser aprensivo y ensaya hasta que te sea fácil decir no.
No es la negación sino como lo dices
Tampoco se trata de ser una persona grosera, se trata de saber cómo decirlo y para eso requieres mantener un lenguaje corporal relajado pero firme viendo a los ojos a la persona y sin dudar. Trata de que el nivel de voz que utilices no suene como que gritas o balbuceas. Di la negación de manera clara.
Acepta que eres humano
Es importante que sepas que eres humano y puedes estar decir que no porque también necesitas descansar. El decir “si” en todo momento hace que dejes la vida que quieres por vivir lo que las personas van eligiendo para ti. Por eso, reconoce que habrá momentos en los que ya no puedas y decir NO te ayudará a poder concentrarte en ti.
Todos podemos equivocarnos o querer lo mejor para nosotros pero así como no te gusta que abusen de eso y solo culpes a otros. Toma el control de tu vida y de lo que quieres lograr al decir no en el momento indicado. Todo es un aprendizaje del que vale la pena ir explorando cada día.
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