Lo que en 2014 se contaba como un sueño, hoy es una realidad. The Macallan abrió una de las destilerías más avanzadas del mundo en su natal Escocia, y hoy, con un año trabajando ahí, rinden homenaje a su propia esencia con un nuevo whisky, The Macallan Estate.
Lo que hace único a este whisky es que la cebada utilizada en su procesamiento proviene de la misma destilería, cuando el resto de la cosecha de Macallan suele provenir de distintos lugares. Además, el whisky sin definición de edad, maduró en barricas tipo butt y hogshead, lo cual garantiza un sabor con sutiles toques cítricos, traduciéndose en una sola malta compleja, pero con un final bastante largo.
Según la propia destilería, The Macallan Estate en nariz aporta notas cálidas como canela, especias de madera y aceite de naranja, abriendo camino a aquellas provenientes de frutos secos con limón, plátano y caramelo. Mientras que en paladar, es suave y delicado resaltando el sabor a roble seco, higo y pasas. Entre sus matices, aporta naranja y cítricos frescos. El final resulta en un toque dulce de cítricos.
Con un diseño inspirado en los paisajes de la destilería ubicada en la región de Moray, The Macallan Estate celebra la tradición con la innovación, el arduo trabajo que desde 1824 los ha posicionado como una de las mejores marcas del mundo y la capacidad de no sólo mantener su estándar de calidad, sino superar sus propias expectativas en cada botella que producen.
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