Por Regina Lázaro
Hay quieres prefieren los productos que son personalizados según sus gustos y que por ello, no implican ser hechos en masa o en grandes lotes. Por lo que M. Micallef se muestra como al mejor opción para quienes exigen una esencia hecha a la medida y cuyo aroma se encuentre inmerso en una botella con delicados detalles de arte incluidos, previamente seleccionados por el cliente.
Siendo M. Micallef una referencia importante dentro de la alta perfumería, su minuciosa producción lo ha llevado a crear esencias con delicados detalles de arte incluidos, donde son las propias manos las que moldean las esculturas que ornamentan cada una de las botellas y que destacan el uso de finos cristales Swarovski entre los extractos más selectos que dan paso a las notas personalizadas de cada una de sus fragancias.
El diseño de cada una de las botellas está condicionado a la imaginación de cada una de las personas, que no sólo refleja la personalidad desafiante sino que también deja ver la creatividad empleada en la creación de una esencia propia que alberga cada uno de los ingredientes finamente tratados en el proceso. A su vez, las botellas son hechas bajo una técnica exhaustiva pero que refleja los más delicados detalles que son bañados en oro de 24K.