El calentamiento global es tal vez la crisis más grande de la humanidad en el siglo XXI. Aunque aún tenemos pendiente terminar con otros problemas que hemos enfocado como prioridad desde hace siglos (la pobreza y el hambre), el calentamiento global nos enfrenta a un escenario de extinción masiva y sin duda es algo que debemos resolver de inmediato. Por eso, marcas como Jaguar están cambiado la manera en que producen sus vehículos.
Con el paso de los años, las señales de que debemos cambiar han crecido y ahora vemos la relación entre el derretimiento de los polos, los incendios en lugares como California o Australia y el incremento de la marea en Bangladesh. Es por eso que muchos gobiernos se han puesto límites para cambiar las políticas contaminantes, muchos de ellos incluso han puesto un límite para que las empresas dejen de producir vehículos que usen combustibles fósiles para funcionar.
California prohibirá la venta de vehículos que usen combustible en 2035, Francia hará lo mismo en todo el país en 2040 y Noruega espera implementarlo incluso antes, en 2025. Esta fue razón suficiente para que Jaguar Land Rover anunciara que para 2025 todos los autos Jaguar que produzcan sean completamente eléctricos.
Por ahora, Jaguar sólo cuenta con el I-Pace en el sector eléctrico, pero para ese momento, se espera que todos los Jaguar y gran parte de Land Rover sean eléctricos (la primera Land Rover eléctrica llegará al mercado en 2024). El principal mercado de JLR está en Inglaterra, país que prohibirá la venta de vehículos no eléctricos en 2030, y la marca espera que para ese momento 60 % de sus vehículos sean eléctricos y sólo nueve años después, en 2039, alcanzar la meta de cero emisiones de carbono.
Esto pone a Jaguar como uno de los competidores más importantes para el futuro de la industria, aunque se mantiene como una marca de lujo, también está liderando el movimiento del futuro de la movilidad.