Amo la comida callejera. Su sabor es reconfortante, las porciones suelen ser abundantes y basta con moverte unos cuantos kilómetros para empezar a ver distintos tipos de comida. En México no puedes escapar de los tacos o las gorditas, en Italia, a pesar de lo que muchos piensan, el arancini y no la pizza, es el platillo de las calles.
Bolas de arroz fritas es el primer término con el que puedes describir este platillo y eso nos da una idea de por qué es la comida callejera de Italia (o por lo menos de una región), como casi toda esta comida, el punto está en freírla hasta darle un color característico que lo hace apetecible a todo el mundo. Aunque la receta original y parte por la que lleva ese nombre tiene que ver con que el arroz lleva azafrán para tomar un color característico, el que probamos en Gracias Comedor y el que se prepara en gran parte del mundo ahora se hace con rissoto.
El menú temporal de Gracias Comedor actualmente está centrado en la comida callejera, por lo que los platillos van desde camarón con noodles, pho e incluso un postre llamado boing de guayaba, hasta este increíble arancini que literalmente es una bomba de sabor.
La complejidad de un arancini depende de quien la cocine, por lo que si un día te decepciona uno, ten por seguro que posiblemente solo fue una bola de arroz frita y rellena de queso. En Gracias Comedor puedes sentir las capas de sabor, desde el crujuente exterior, la sutileza del risotto que mantiene una textura perfecta y el relleno que intensifica todo lo anterior.
Parece que hablo de lo mismo, pero son los pasos extras lo que cambian todo. Un simple arroz puede ser delicioso, pero el risotto ya es un platillo muy elaborado, y al tomarlo de esta manera para hacer algo aún más complejo te deja ver por qué este platillo es consumido a altas horas de la noche después de las fiestas en Italia.
El arancini de Gracias Comedor viene en una porción pequeña (después de todo, además de eso tienes que probar otros seis platillos) lo que permite que mantenga una textura perfecta. Muchos arencinis tienen el ragú dentro, pero aquí sirve para decorar sin perder la estructura del platillo, sumando puntos por su presentación, pero manteniendo la tradición.
Es una ironía que un menú tan delicioso como este solo esté disponible de manera limitada, pues en unas cuantas semanas, Gracias Comedor dará vuelta a la página y continuará experimentando con nuevos platillos, así que si quieres probar una de las joyas del street food a nivel mundial, no lo pienses más.
Dirección: Colima 333 interior 7, Col. Roma
Tel: 55 8805 6582 (Reservas por Whatsapp)
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