El despertar puede ser algo verdaderamente difícil, y más cuando te desvelaste hasta tarde o vienes de un viaje cansado. Existen muy pocas cosas que pueden lograr que nos levantemos con todo el entusiasmo y la actitud, una de ellas es una muy buena taza de café.
Existen muchas maneras de poder conseguir un café que te despierte y claro, que te guste. El sabor de tu café no solo depende del tipo de grano que escojas o los ingredientes extras que le pongas, sino también influye la manera en que extraes el sabor del grano. Hay muchas formas de extraer café las cuales se dividen en dos: inmersión e infusión.
Lee también: Café en una deliciosa gelatina
La primera abarca todos los métodos en el que el café se sumerge en el agua hasta que extraiga el sabor del café. El segundo es un poco más complejo, ya que requiere de que el agua esté en constante movimiento y que pasé por cámaras en donde se encuentre el café.
Algo que tienes que tener en mente es el molido y tostado de tu grano. Tu método debería de estar enfocado en estos puntos para que tu café tenga un mejor sabor. Una vez que sepas esto, puedes escoger de las diferentes formas de extracción, aquí te presentamos algunas que te pueden llamar la atención.
Métodos de inmersión
Prensa francesa
Este método es uno de los más conocidos mundialmente. Podrás conseguir un café más denso pero al mismo tiempo sutil. Lo mejor es que es muy fácil conseguir una prensa francesa y poder usarla sin mucho problema. Solo tienes que servir el café justo cuando se haya terminado de extraer para que no se amargue.
Sifón
El sifón existe desde 1840 pero se ha visto modificado durante los años. Hoy en día es un método que requiere de mucha precisión pero que si realmente quieres un buen café, vale mucho la pena. Para empezar, necesitas un poco más de tiempo ya que tienes que esperar a que se moje bien tu filtro, a que hierva el agua y a que el café se cuele. Pero verás que no es tan complicado de llevar acabo los pasos necesarios.
Lee también: QUIZ: ¿Qué tipo de café va más contigo?
AeroPress
Este método fue creada con el principio de aerodinámica. Es algo complicado de explicar, pero son dos tubos que se unen, en uno dejas el agua con el café por alrededor de 30 segundos. Después tienes que empujar el otro tubo para poder sacar el agua por el filtro y servirlo en una taza sin que ésta se llene del residuo de tu grano.
Infusión
Chemex
Si es la primera vez que usas un dripper, el chemex es el método para ti. Es uno fácil de conseguir y de usar. De hecho es uno de los drippers con más espacio para el error, pero esto no significa que no tengas que poner atención a lo que haces. Tanto la temperatura de tu agua, como a la cantidad de tu café como la velocidad en la que viertes el agua son cosas sumamente importantes.
Nel drip
Si te consideras todo un experto del café y que además tienes una mano super estable como la de un cirujano, este método te encantará. No solo necesita de una precisión exacta y de cuidado extremo, sino que también su resultado es un café más dulce con mucho cuerpo y textura que creará una explosión de sabor en tu boca.
Lee también: ¡Encontramos exóticos lattes en la CDMX y no te los puedes perder!
Pour Over
Este es un método muy simple en el que no se requiere de una maquinaria elegante ni nada. Solo necesitas una taza, un dripper y un filtro. Los pasos son igual de fáciles, ya que tu agua esté caliente solo tendrás que servirlo en 4 partes en tu filtro y esperar a que se termine el agua.