La canción The Louvre de Lorde habla de un amor tan humano, real, problemático y hermoso que es como una obra de arte, a tal nivel que merece ser colgada en el Museo Louvre en el fondo, pero a quién le importa, es el Louvre.
Cuando algo se convierte en arte vive para siempre, y así como Lorde cantó sobre cómo el amor puede ser arte, otros músicos han hecho odas al arte en sí. Estas canciones demuestran la fuerza que una pintura puede tener en la gente, cómo puede llegar a influir de tal manera que canten canciones sobre ellas y que además de existir, sean la inspiración para nuevas obras de arte, esta vez auditivas.
La Mer – Claude Debussy
Aunque algunos llaman a esta pieza un trabajo impresionista, Claude Debussy eligió la famosa pintura de La gran ola de Kanagawa de Katsushika Hokusai para ilustrar el verdadero sentimiento de la canción, pues según él, se inspiró en temáticas japonesas.
Viva la vida – Coldplay
Durante la grabación de este disco, Chris Martin y compañía se adentraron en el trabajo de Frida Kahlo y descubrieron la pintura Viva la vida, que los inspiró de tal manera que no sólo llamaron así a una de sus canciones más famosas, el disco completo lleva el nombre de Viva la Vida or Death and All His Friends.
Big Eyes – Lana Del Rey
Lana Del Rey fue la elegida para grabar una canción para la película de Tim Burton acerca de la vida de la pintura Margaret Keane. Más que inspirarse en una pintura, la cantante tomó la vida de Keane como inspiración, sin embargo, escuchar la canción mientras ves una de las pinturas de ojos grandes que aparecen en la película, le da un nuevo sentido a la canción.
Mona Lisa – Nat King Cole
Considerada la obra de arte más importante del mundo, Nat King Cole se inspiró en la belleza y el enigma de la mujer pintada, así como en su popularidad, para esta canción de amor capaz de hacer suspirar a cualquiera.
Venus – Lady Gaga
El disco Artpop de Lady Gaga está centrado en el arte, pero esta canción en específico hace referencia a una de las piezas más importantes del Renacimiento, El nacimiento de Venus de Sandro Botticelli, que puedes visitar en la Galería Uffizi, en el corazón de Florencia.
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