Primero fue el tequila, la bebida de Jalisco se convirtió en una sensación que recorrió el mundo y se convirtió en sinónimo de México. Después el mezcal fue exportado de Oaxaca y poco a poco se ganó el corazón de millones. Incluso hoy en Park MGM en Las Vegas, hay un bar dedicado exclusivamente a estas dos bebidas llamado Mama Rabbit.
Los licores mexicanos van en auge y hay un nuevo contendiente, el pox (o posh). Esta bebida de Los Altos de Chiapas es un aguardiente creado a partir de la fermentación del maíz, por lo que tiene una importancia cultural inmensa para las comunidades mayas, sobre todo la tzotzil y tzetzal.
Se trata de una bebida ceremonial que ha estado presente en estas comunidades desde hace dos mil años, pero hasta hace poco era exclusiva de ellos, sin embargo en 2012 la producción y venta de pox fue autorizada fuera de la línea estatal y en muy poco tiempo el licor ha fascinado a la mixología nacional y extranjera.
El sabor tradicional del pox ha ganado adeptos, quienes lo toman en vasos tequileros, a veces acompañado de una cerveza, pero los productores también han mezclado el alma del pox con frutas tradicionales de Chiapas para darle un sabor dulce, y estas se han convertido en un éxito, sobre todo para los mixólogos que han sido muy creativos al momento de crear nuevas bebidas con pox.
Algunas son tan simples como agregar laurel, romero y menta para hacerla más aromática, mientras que lugares como Fifty Mils han creado tragos con pox nunca antes vistos. A través de la marca Siglo Cero, esta bebida ya se encuentra en Estados Unidos, lo sorprendente es que mientras el tequila y mezcal tardaron muchos años en convertirse en las estrellas del lugar, el pox ya es tendencia en bares de Washington, Los Angeles y Nueva York.
Cada vez son más las marcas de pox que salen al mercado, y pronto serán muchas las que se encuentren en todo el mundo llevando la bebida maya artesanal al paladar de todos. ¿Tú ya la probaste?
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