Es difícil pensar en los discos más recientes y no compararlos con algunos de los mejores que se han publicado en esta década. Hoy ya hay muchas listas con las mejores publicaciones de estos 10 años, su importancia y legado, por lo que nuestra mente está fresca respecto a eso, sin embargo, al escuchar el nuevo material de FKA Twigs es imposible no pensar que tal vez el mejor disco de los últimos 10 años apenas acaba de publicarse.
MAGDALENE es el título del segundo material de larga duración de la cantante, bailarina y directora británica. Desde su primer LP y a pesar de su corta edad, se convirtió en una especie de símbolo de culto. Su música es pop, pero no es fácilmente digerible, no es lo que aparece en las listas de éxitos mundiales, sin embargo, los medios especializados sí la conocen y la respetan al extremo.
De hecho, la razón por la que FKA Twigs pasó de ser una estrella del música independiente a ser la cabeza de los tabloides a nivel mundial (sobre todo en Inglaterra) fue por su relación con Robert Pattinson. Después de rumores y muchas críticas negativas en estos medios masivos, Twigs se enfrentó a un problema médico, lo cual terminó por causar un quiebre y obligarla a buscar refugio en su música.
MAGDALENE es una metáfora sobre el amor y el dolor, la artista usa la figura de María Magdalena para reflejar el camino que ha pasado en los últimos años, a pesar de su talento, para muchos ella era “la novia” de una estrella de cine y por lo tanto sólo un píe de página en la historia de su ex novio, así como María Magdalena, una mujer crucial en la narrativa de Jesús que fue reducida al papel de una pecadora y prácticamente un punto incómodo en el discurso oficial de la religión.
El nuevo disco de FKA Twigs cambió la dirección de la artista, pero el sonido se transformó de una manera que resulta espectacular. Abriendo con Thousand Eyes, una apertura que explota su voz de soprano de Twigs, es un lamento a un amor perdido, una manera de buscar redención donde ya no es posible encontrarla. Después sigue con Home with You, que revela el dolor, la ira y frustración que acumuló durante años.
Al llegar a Sad Day, ya se puede notar ampliamente la mano de Nicolas Jaar en la producción. Sampleos sutiles que hacen que lo electrónico parezca orgánico, e incluso el trabajo que Skrillex hizo en esta canción la convierten en uno de los tracks más poderosos del disco.
No sólo fue Nicolas Jaar, otros productores como Jack Antonof, Noah Goldstein, Benny Blanco y más colaboraron para construir esta obra de arte que demuestra que la música de hoy no es repetitiva y carece de creatividad, simplemente hay una sobreexposición de material que resulta ser lo más popular, Incluso demuestra que no hay que ir muy lejos y que en el pop puedes encontrar las grandes obras de arte del siglo XXI.
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