Jeff Bezos es el CEO de Amazon y algunos lo consideran el más exitoso de la historia. Comenzó una compañía que vendía libros por internet y la transformó en un imperio que ha cambiado el mundo (para bien o mal, pero lo ha hecho), por lo que la noticia de que iba a dejar la dirección de su empresa para buscar en sus otras pasiones no pasó desapercibido y rápidamente supimos que la conquista del espacio (¿podíamos esperar menos?) era parte del plan.
La pasión de Bezos por el espacio no es un secreto, se dice que incluso fue su decisión que Prime Video comprara la serie The Expanse, que había sido cancelada, sólo para que él supiera cómo terminaba, y como un negocio a futuro, Blue Origin es una gran elección, pero convertirse en uno de los primeros civiles en dominar el espacio es decir mucho, y es uno de los primeros planes de Bezos después de dejar Amazon.
Jeff Bezos viajará al espacio en una nave llamada New Shepard junto a su hermano Mark Bezos, un pasajero secreto (por lo menos no se ha dado su nombre ni la intención de revelarlo) y un afortunado comprador, quien recientemente adquirió el derecho a ese asiento tras una rápida subasta que se salió de control y llegó a un precio exagerado.
La puja inició en 4.8 millones de dólares y en cuestión de diez minutos se había elevado a los 28 millones. Cabe mencionar que este viaje tendrá una duración de cerca de 10 minutos donde la aeronave se alzará casi 100 kilómetros sobre la superficie y le dará a los pasajeros unos tres minutos sin gravedad, para después aterrizar nuevamente.
A pesar de eso, el precio de 28 millones de dólares (cerca de 558 millones de pesos) es sólo la mitad de lo que cuesta enviar a un astronauta a la órbita del planeta, por lo que misiones como estas parecen ser necesarias para comenzar una nueva era aeroespacial donde las empresas privadas puedan enviar gente al espacio y con el paso del tiempo reducir costos y mejorar la infraestructura espacial.
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