En esta época de calor es más probable que hagamos actividades relacionadas con la naturaleza: desde senderismo hasta paseos en bici o excursiones para acampar a la luz de la luna y las estrellas. En este proceso es probable que nuestra interacción con el ambiente pueda causar fuego, por lo que es necesario tener más precaución para saber cómo evitar incendios forestales. De hecho, el Centro Nacional de Prevención de desastres dice que 9 de cada 10 incendios en el país son provocados por los humanos.
Las causas de un siniestro son variadas y pueden ir desde accidentes de auto hasta caída de rayos o quemas no controladas de cigarros y fogatas. Además, esto se incrementa por las altas temperaturas, los vientos y la falta de lluvias en esta temporada. Según las autoridades, en el centro y sur del país, la temporada de incendios va de enero a mayo (justo cuando sube el termómetro), mientras que en el norte se produce de mayo a septiembre.
Por eso, si vas a salir a algún bosque, área verde o parque natural, toma en cuenta estas precauciones.
Cómo evitar incendios
No quemes basura ni ningún material inflamable como alcohol. Lleva bolsas para colocar tu basura y espera a llegar a casa para depositarla. Igualmente, evita tirar cualquier desecho en tu recorrido o estancia.
Cuida las fogatas. Elige un espacio que esté libre de hojarasca y de los árboles, a fin de que no se salga de control. Y cuando te vayas del lugar, apágala completamente con agua.
Evita fumar. Aunque vayas a tirar los restos del cigarro en un recipiente, cualquier ceniza en un área seca puede ocasionar un incendio.
No tires vidrios, botellas ni espejos. Estos materiales pueden producir un efecto lupa que, con el calor y material inflamable suficiente, ocasionarán un incendio.
Cómo ayudar si ya hay un incendio
En caso de que ya se esté produciendo y te encuentres cerca, puedes hacer esto: primero, repórtalo al 800 737 00 00 o al 911. También, recuerda mantenerte a salvo y atender las indicaciones de autoridades y especialistas para actuar.
Además, puedes acercarte a las oficinas de Protección Civil locales para saber cómo puedes ayudar: a veces se necesitan donaciones de agua, sueros, comida, equipo de protección, picos, palas, entre otros elementos.
Otro aspecto importante se relaciona con los animales locales, que muchas veces escapan de las llamas y pueden llegar a poblaciones o ciudades para resguardarse. En esos casos, no los asustes y ponte en contacto con autoridades y asociaciones para que los resguarden.