Encontrar y elegir la loción perfecta para ti ya es un reto en sí. Después, cuando comienzas a usarla, te das cuenta que no dura suficiente, que tal vez no la estás aplicando bien o que no la estás administrando de manera correcta. Es posible que cometas un par de errores a la hora de aplicarse loción, pero para eso hay simples consejos y pasos que seguir que te facilitarán la vida y olerás increíble por más tiempo.
Una vez que hayas elegido tu loción ideal, aplicarla correctamente en cierta forma, una forma de química. La colonia o loción está hecha de moléculas que se descomponen con el tiempo, lo que significa que debes prepararla para que se descomponga en el mayor tiempo posible y dure más.
Cuando la loción comienza a descomponerse, lo hace en capas. Primero revela sus notas de cabeza, luego sus notas medias y, finalmente, sus notas de fondo. Entre mejor seas en esto de aplicarte loción, mejor estela (rastro de olor) obtendrás, y el olor de la colonia será más complejo y estratificado a lo largo del día y, mejor aún, te durará más cada botella.
Tres simples pasos para hacerlo bien
1. Asegúrate de que tu piel esté seca correctamente, preferiblemente recién salida de bañarte, cuando los poros están más abiertos. Esto permitirá que la piel atrape la mayor cantidad de loción posible, lo que generará menos desperdicio.
2. Identifica tus principales puntos de calor. Si bien la mayoría de las personas optan por la rutina simple de cuello y muñecas; los hombros, la parte interna de los codos y las axilas también son áreas muy cálidas.
3. Rocía sobre estas áreas con suficiente distancia. Generalmente se recomienda una distancia de 8 a 15 centímetros. Asegúrate de que la botella haya funcionado según lo previsto y haya dispersado correctamente la colonia en el aire.
Qué evitar
Al aplicarse loción, hay que evitar empapar las muñecas y el cuello con la fragancia. Si tienes una loción de alta calidad y lo has aplicado correctamente, 1 spray por área funcionará mucho mejor.
No caigas en la trampa de rociar sobre la ropa, rociar en el aire y caminar a través de él, o rociar en un lugar y frotarlo sobre el resto de sus áreas calientes. La loción necesita el máximo contacto con la piel para ser más eficaz, y valdrá la pena las aplicaciones adicionales.
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