Los colores pueden influir en nuestras emociones aunque poco lo creamos. La ciencia ha estudiado por años cómo nuestro cerebro y en general nuestro sistema los recibe y cómo responde a ellos. Por otro lado el descanso es primordial para que todo funcione correctamente en el día, así que al unirlos, ¿qué colores podemos usar en nuestro dormitorio que nos ayuden a descansar mejor?
Nuestra habitación debe estar acondicionada de manera muy personalizada con todo lo que a nuestro cuerpo le hace descansar; hablamos de tonalidades en iluminación, temperatura, texturas, materiales, ruido o ausencia de él, espacio y por supuesto, colores.
En esta búsqueda de crear un oasis que le funcione a tu descanso nos encontramos con un manejo de tonalidades en todo lo que hay en él: desde el techo, las cobijas, tapetes y accesorios. Aunque podamos no creerlo, hay algunos colores que afectan a nuestra relajación.
Lo primero que debes identificar es qué tonalidades quieres utilizar, ya sea colores claros u oscuros, de saturación intensa o más apagada, de temperatura cálida o fría, o más neutros. En todas las gamas hay colores que pueden ayudarnos en esta habitación.
Colores relajantes para el dormitorio
Por tonalidad (claro u oscuro)
Si hablamos de los colores por tonalidad, los claros reflejan la luz mientras que los colores oscuros la absorben. Si utilizas los colores claros harás que tu cuarto se vea alegre, luminoso, más amplio y fresco, por otro lado si te parece relajante una habitación más pequeña y sombría, ocupa tonos obscuros. Los expertos recomiendan optar por colores claros para ayudarte con el descanso pero quizá descubras que a ti te funcionan los otros, además de aportar elegancia y sofisticación.
Por temperatura (cálidos o fríos)
Aquí se dividen más los gustos, podrías experimentar con ambos y descubrir cuáles te reflejan más tranquilidad. Algunas personas prefieren poner los colores de un atardecer porque les recuerda a los días de playa donde todo está muy tranquilo. Colores como ladrillo, anaranjados, rosas, amarillos y todos los que hacen referencia al fuego.
Por el contrario algunas personas sienten más descanso en una tarde fría de invierno y los colores en la gama de azules, grises, blancos y algunos verdes los llenan de paz que pueden llevar a su dormitorio.
Por saturación (intensos o apagados)
Si hablamos de saturación, lo recomendable es aplicar colores apagados para crear un ambiente suave, ligero y tranquilo. Si te gustan los colores intensos como rojo o amarillo puedes utilizarlos en algunos complementos porque ellos nos despiertan, llenan de energía y vuelven al cuarto un lugar vibrante.
La idea es jugar con estas tres características del color para crear tu ambiente sereno perfecto y poder llegar a casa para descansar y reponer energías para el siguiente día.
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