La avena es un cereal maravilloso considerado superalimento que aporta muchos beneficios a nuestro cuerpo. No solo es un ingrediente sano que se puede utilizar en diferentes preparaciones en la cocina; además de muy rico también tiene numerosos nutrientes y propiedades si lo ingerimos o incluso para el cuidado de nuestra piel.
Es una maravilla en muchos sentidos y su uso viene desde tiempos muy remotos. Se dice que en el Antiguo Egipto usaban la avena en baños para tratar afecciones como quemaduras. Su uso ha pasado de generación en generación y se ha expandido por todo el mundo. Ahora además de ingerirlo podemos encontrarlo como ingrediente en productos para el skincare.
Beneficios de la avena
Pero ¿qué hace a la avena un ingrediente tan lleno de ventajas para nuestro cuerpo en general? Tiene un secreto que la convierte en maravilla: las avenantramidas, un compuesto natural de alcaloides fenólicos que ayudan a controlar el colesterol si lo ingerimos, así como a regular la glucosa en nuestra sangre.
Es antioxidante, hidratante purificante y antiinflamatoria. Tiene sustancias llamadas saponinas que tienen un efecto antimicrobiano y antibacterial. Si lo utilizamos en la piel con mascarillas o productos que la contienen en su fórmula, la protege y limpia gracias a los fenoles que tienen la capacidad de absorber la luz ultravioleta.
Calma irritaciones, alivia el picor de la piel, ayuda a calmar e hidratar si te has quemado con el sol. Le da una suavidad maravillosa pues además aporta grasas insaturadas y ácido linoleico que favorece la regeneración celular.
Funciona perfecto como exfoliante, ayuda a eliminar las células muertas que se acumulan en la piel y destapar los poros atascados de contaminación y otros agentes a los que nos enfrentamos día con día. Se adapta a todo tipo de piel, desde la más seca pasando por la mixta y hasta la más grasa ayudando a nivelar el pH de todas.
Es muy versátil y uno de los ingredientes más nutritivos de los que se tiene registro. Cuenta con proteínas, minerales y vitaminas del complejo B. La más común y nutritiva es la avena blanca que consumimos con frecuencia
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