El odio es un sentimiento que sólo puede existir en ausencia de toda inteligencia, solía decir el escritor Tennessee Williams. No aceptar nuestras diferencias hace más daño al mundo de lo que pensamos. Las grandes catástrofes en el mundo, sucedieron no porque se necesitaban medidas inmediatas para reparar una crisis. Sino por diferencias de religión, raza, ideologías y nacionalismos que al principio parecían simples formas de pensar. Pero una vez que se arraiga el odio, no hay vuelta atrás.
Uno de los museos más aleccionadores sobre este tema es el Museo de Memoria y Tolerancia. Con solo asistir a un recorrido guiado de dos horas, tendrás más perspectiva del mundo que nunca. A través de los genocidios que el mundo ha sufrido, exploran los crímenes iniciados por el odio y la intolerancia. Si todavía no has ido, te damos 10 razones para visitarlo y reflexionar.
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1. Te adentrarás en la historia
Con solo ir al museo y hacer el recorrido guiado, aprenderás más de historia que en la escuela. Pero no se trata de una clase aburrida llena de datos, sino un paseo interactivo por los sucesos que marcaron nuestro mundo. A través del Holocausto, casos en Armenia, Guatemala, Ruanda, Camboya, Darfur, Ex Yugoslavia y México. Con un énfasis en crímenes de guerra y de lesa humanidad.
2. Recordarás
Si algo hemos hecho mal como sociedad, es olvidar. Sobre todo en la sociedad mexicana donde todos los días se violan los derechos humanos, se hace noticia y rápidamente lo dejamos. El museo de Memoria y Tolerancia nos hace recordar los episodios más crudos de la humanidad para tenerlos presente y saber identificar cuando algo similar se avecina.
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3. Pondrás las cosas en perspectiva
Ir al Museo de Memoria y Tolerancia te dará más perspectiva sobre el mundo. Así entenderás los diferenctes movimientos, creencias, ideología y cultura de los países. Para entender mejor el contexto de cada país cuando salgas de viaje y no sea tan fuerte el “shock” cultural.
4. El edificio también es un atractivo
Una razón más para visitar el museo es su estructura arquitectónica. El estudio mexicano Arditti + RDT fue el encargado de darle diseño y forma al icónico recinto en la CDMX. Uno de los espacios más importantes del museo es el cubo suspendido en memoria de los niños asesinados en genocidios. El cual es una obra de Jan Hendrix en colaboración con los arquitectos.
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5. Es muy interactivo
No es un museo donde solo lees y ves. MyT tiene dinámicas para hacer el recorrido más interactivo y que olvides el tiempo. Podrás entrar en un tren de la Segunda Guerra Mundial que utilizaron los nazis para las “marchas de la muerte”. Además de dinámicas donde ves un video y tú debes elegir lo que el personaje tiene que hacer. Así mismo te muestran un caso aplicado en México.
6. No podrás evitar reflexionar
Aprenderás el verdadero significado de tolerancia. No se trata de ser condescendientes, consiste en el respeto, el aprecio y la aceptación de otras culturas y formas de vida. Se trata de un museo que te invita a salir de tu realidad para ver que en el mundo hay más y necesitamos aprender de los errores del pasado.
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7. Abrirás los ojos gracias a su crítica
El Museo de Memoria y Tolerancia es único. La mayoría de las veces vemos organizaciones mundiales como salvadoras del mundo y la paz. Pero en el museo hacen una crítica a las fallas que estas instituciones tuvieron al tratar los crímenes de guerra y genocidios. Así que cumple su función de abrir los ojos.
8. El servicio de los guías es muy amigable y eficiente
La organización y atención es algo que siempre debe resaltar en todos los lugares que visitamos. Por su parte, el staff del Museo de MyT es implacable. Te recibirán y estarán ahí para guiarte durante el recorrido. Los audios, guías, tiempo en las salas y demás dinámicas en el recorrido están sincronizadas perfectamente para que dure lo que prometieron y respetar el horario de todos.
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9. Ofrece exposiciones temporales, además las permanentes
Además de tener dos secciones con exposiciones permanentes, memoria y tolerancia, siempre hay una temporal. Ya sea de Nelson Mandela, Martin Luther King o Yoko Ono, buscan mostrar otros ámbitos de la paz y la tolerancia. Así que si ya visitaste el museo, tienes razones para ir de nuevo.
10. Hay más que conocer además del museo
En el Museo de Memoria y Tolerancia todo está calculado. Si necesitas servicios especiales, te pueden asistir y no es algo enredado, ni complicado. También tienen biblioteca en la que puedes consultar libros y salas educativas. Por otro lado, cuentan con salas donde los niños pueden trabajar aprender del tema.
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