Por Mary Gaby Hubard
El término “ir por un café” implica pasar el tiempo dentro de un establecimiento, en el que probablemente se sentarán a leer, platicar o trabajar un poco… pero ¿se imaginan, que en vez de pagar por la bebida, tuvieran que hacerlo por cada minuto que pasan ahí dentro?
Tal es el caso de la cadena rusa de cafés “Ziferblat” (significa reloj), a la que entran los consumidores y en vez de pagar por un café, un té o algún “snack” lo hacen por el tiempo que pasan ahí. Conocidos como los “pay-per-minute cafes”, estos sitios abrieron recientemente una sucursal en Londres y dentro de ellos podrán encontrar todo gratis… menos el tiempo.
Al llegar, los clientes reciben relojes para medir el tiempo que pasan dentro del restaurante. Pueden entrar, y servirse alguno de los alimentos de la cocina o incluso prepararse algún platillo. Tomar un café, e interactuar con los demás clientes. Todo el concepto es self service, y una hora ahí dentro cuesta aproximadamente f £1.80.
En el Ziferblat, el tiempo vale oro… literalmente.
Twitter: @MGHUBARD