Ahora más que nunca está de moda las innovaciones tenológicas que nos ayudan a disminuir la presión que ejercemos en el medio ambiente. Y a esta tendencia se suma uno de los íconos arquitectónicos más importantes del mundo: la Torre Eiffel.
Los parisinos quisieron que la torre generara su propio poder así que un comité a cargo de La Société d’Exploitation, encargados de mantener la torre a la vanguardia en cuanto a tecnología y diseño, instaló unas turbinas de aire VisionAIR5 que con el poder del viento pueden generar su propia electricidad.
Estas turbinas hacen que la torre sea autosustentable, producen electricidad suficiente para prender el primer piso. Están a 122 metros del suelo y las pintaron especialmente para que se camuflagearan con la estructura. Con este nuevo proyecto reducen el impacto ambiental de la torre en un 25%.