Cuando se planean vacaciones, se suele caer en la trampa de las ciudades turísticas más populares, aquellas que parecen imprescindibles en cualquier lista de viaje.
Pero muchos de estos destinos pueden estar abarrotados, ser caros y, a veces, no cumplen las altas expectativas generadas por redes sociales y guías turísticas. Afortunadamente, el mundo está lleno de tesoros ocultos que ofrecen experiencias igual de ricas, o incluso mejores, que los destinos turísticos más conocidos. Estos lugares alternativos permiten disfrutar de la belleza y la cultura de manera más auténtica, evitando las multitudes y el precio elevado que a veces acompañan a los destinos más sobrevalorados.
Explorar estos lugares alternativos no solo ofrece la oportunidad de descubrir culturas locales más auténticas, sino que también puede ayudarte a experimentar el entorno con mayor tranquilidad. En lugar de estar rodeado de turistas y largas filas para tomar una foto en los mismos puntos, puedes sumergirte en la vida diaria de estos lugares alternativos.
Si quieres evitar las multitudes y encontrar lugares más sorprendentes y únicos, esta lista te ofrece opciones emocionantes. Aquí te presento algunas ciudades muy turísticas y populares y sus alternativas menos conocidas.
Destinos alternativos si no quieres ir a ciudades turísticas
En lugar de París, visita Lyon
París, aunque es una ciudad llena de cultura, historia y encanto, se ha convertido en una capital saturada de turistas en busca de la Torre Eiffel y el Louvre. Esto genera largas filas, precios elevados y una experiencia algo estresante. Para disfrutar de la auténtica esencia francesa, considera uno de sus lugares alternativos: Lyon, una ciudad igualmente bella y rica en historia, pero con un ambiente mucho más relajado.
Lyon es famosa por su gastronomía, siendo considerada la capital culinaria de Francia. Aquí puedes disfrutar de los deliciosos bouchons, restaurantes típicos donde se sirven platos tradicionales. Además, Lyon cuenta con un hermoso casco antiguo, Vieux Lyon, lleno de calles empedradas y arquitectura renacentista. Sus festivales, como la Fiesta de las Luces en diciembre, son igualmente impresionantes. Además, la ciudad está rodeada de viñedos y naturaleza, perfecta para explorar en un ambiente más tranquilo y auténtico.
En lugar de Santorini, visita Milos
Santorini ha ganado fama mundial por sus casas blancas con techos azules, pero también ha ganado reputación por ser uno de los destinos más abarrotados de Grecia, especialmente durante el verano. Las multitudes pueden restarle encanto a esta isla icónica, y los precios suelen dispararse. Si buscas una experiencia griega más serena, dirígete a Milos.
Milos es una isla igual de hermosa, con aguas cristalinas, impresionantes formaciones rocosas y playas que parecen sacadas de una postal. La diferencia es que aquí encontrarás menos turistas, lo que te permitirá disfrutar del paisaje y la cultura local de manera más tranquila. Además, Milos tiene una rica historia, siendo el lugar donde se descubrió la famosa Venus de Milo. La gastronomía local y los pequeños pueblos costeros te permitirán desconectar de la aglomeración y conectar con la verdadera esencia griega.
En lugar de Venecia, visita Burano o Trieste
Venecia es sin duda una ciudad única, con sus canales y arquitectura renacentista. Pero ha sido víctima de su propio éxito, con una afluencia diaria de turistas que ha hecho que el lugar se sienta más como un parque temático que como una ciudad real. En lugar de luchar por un espacio en sus calles abarrotadas, te recomendamos explorar Burano o Trieste.
Burano, famosa por sus casas de colores brillantes, está a solo un corto viaje en barco desde Venecia. Este pequeño pueblo isleño es igual de pintoresco, pero mucho menos concurrido. Caminar por sus tranquilas calles es como entrar en un cuadro lleno de colores vivos. Además, es conocida por su encaje tradicional, un arte que ha sobrevivido durante siglos.
Por otro lado, Trieste ofrece una experiencia italiana completamente diferente. Ubicada en la frontera con Eslovenia, esta ciudad combina influencias italianas, austriacas y eslavas. Sus cafeterías históricas, arquitectura de estilo neoclásico y el impresionante castillo de Miramare hacen de Trieste un destino fascinante y tranquilo, alejado del bullicio de Venecia.
En lugar de la Gran Muralla China, visita Pingyao
La Gran Muralla China es una de las maravillas del mundo, pero su popularidad significa que los tramos más accesibles, como los cercanos a Pekín, están repletos de turistas, lo que puede restar encanto a la experiencia. Si deseas explorar la rica historia de China sin las multitudes, Pingyao es una excelente opción.
Pingyao es una antigua ciudad amurallada que ha conservado su estructura medieval y su ambiente histórico. Pasear por sus calles empedradas es como retroceder en el tiempo, ya que muchas de sus edificaciones datan de las dinastías Ming y Qing. Este sitio declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO ofrece una visión auténtica de la historia y la cultura chinas, con menos turistas que los destinos más famosos del país.
En lugar de Bali, visita Flores
Bali es uno de los destinos tropicales más populares en el mundo, pero su creciente fama ha traído consigo grandes multitudes, tráfico y una experiencia que se siente más comercial que espiritual. Si buscas una isla indonesia con paisajes igualmente asombrosos pero menos concurrida, considera visitar Flores.
Flores, situada al este de Bali, es famosa por sus paisajes volcánicos, playas vírgenes y su rica biodiversidad. La isla es un excelente punto de partida para explorar el Parque Nacional de Komodo, hogar de los dragones de Komodo. Además, sus lagos multicolores en el volcán Kelimutu ofrecen una experiencia natural única y sorprendente. A diferencia de Bali, Flores sigue siendo relativamente tranquila y te permite disfrutar de la belleza natural sin las aglomeraciones.
En lugar de Machu Picchu, visita Choquequirao
Machu Picchu es, sin duda, una maravilla arqueológica, pero las multitudes y las estrictas restricciones de acceso pueden hacer que la visita sea menos mágica de lo que uno espera. Si te interesa explorar las ruinas incas en un entorno mucho más tranquilo, considera aventurarte hacia Choquequirao.
Conocido como el “hermano menor de Machu Picchu”, Choquequirao es otro impresionante sitio arqueológico inca, pero es mucho menos visitado debido a su ubicación más remota y al esfuerzo necesario para llegar. Esta misma dificultad es lo que hace de Choquequirao una experiencia única, donde puedes disfrutar de las ruinas sin multitudes y en contacto directo con la naturaleza. Las vistas de los Andes y la sensación de estar en un lugar tan antiguo y aislado hacen que valga la pena el esfuerzo.
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