Por Mary Gaby Hubard
Hace algunos años era impensable que alguien intentaría remover un pedazo de pared por la simple intervención de un Street Artist, para después subastar ese cúmulo de ladrillos y graffiti en miles y miles de dólares. Sin embargo, Banksy ha venido a romper estos paradigmas, y su desmedida popularidad nos ha hecho revalorizar el arte callejero e incluso colocarlo en el mercado. Tanto, que ahora cientos de coleccionistas y vendedores son capaces de hacer cualquier cosa por poseer alguna de las obras del artista.
El diario The Independent tuvo la fortuna de presenciar el “detrás de escenas” del momento en el que quitaron un muro con el graffiti de “Girl with the red Ballon” del artista (que ahora cuesta aproximadamente £500,000). Este proceso, cuesta más de £68,500 e involucra el trabajo de siete constructores especializados.
Primero, un restaurador de arte estabiliza el muro para después remover algunos ladrillos y poder cortarlo con una sierra de punta de diamante de aproximadamente un metro y una circular. Levantan la obra entre los siete especialistas, la transportan a un lugar “secreto” donde seis restauradores trabajan en ella y la matienen a una temperatura controlada. Todo el proceso, dura más de un mes y se hace con vigilancia las 24 horas.
¿Creen que Banksy alguna vez se imaginó el impacto que causaría?
Twitter: @MGHUBARD