La locura por RBD tiene casi dos décadas entre nosotros. A veces parece apagarse, pero si algo nos han enseñado los conciertos de su reunión, es que sus fans pueden crecer, pero la pasión por un grupo con un origen tan peculiar nunca se terminará.
Todo comenzó en 2004, cuando la cadena mexicana Televisa lanzó “Rebelde”, una telenovela juvenil basada en la serie argentina “Rebelde Way”. La trama giraba en torno a un grupo de estudiantes de una prestigiosa escuela privada, que formaban una banda para expresar sus sueños y aspiraciones. Lo que nadie anticipó fue que la ficción se convertiría en realidad.
Los protagonistas de Rebelde: Anahí, Dulce María, Maite Perroni, Alfonso Herrera, Christian Chávez y Christopher Uckermann, no solo capturaron la atención de los televidentes con sus actuaciones, sino también con su música. La banda sonora de la telenovela, interpretada por ellos, se convirtió en un éxito instantáneo, llevando a la creación de RBD, el grupo musical.
RBD no tardó en trascender las fronteras de la televisión. Su primer álbum, Rebelde, lanzado en 2004, fue un éxito rotundo, vendiendo millones de copias no solo en México, sino en toda América Latina. Canciones como Sálvame y Ser o Parecer se convirtieron en himnos para una legión de fans.
Pero el fenómeno RBD no se detuvo ahí. Pronto, su fama cruzó océanos, llegando a países como Brasil, España y Estados Unidos. En Brasil, por ejemplo, se convirtieron en un verdadero fenómeno de masas, llenando estadios y rompiendo récords de ventas. En Estados Unidos, fueron uno de los pocos grupos de pop latino en llenar el Madison Square Garden de Nueva York.
La clave del éxito de RBD no solo estaba en sus pegajosas melodías y carismáticas presentaciones, sino también en la conexión genuina que establecieron con sus fans. A través de sus letras, trataban temas con los que los jóvenes se identificaban profundamente, como el amor, la amistad, los sueños y los desafíos de crecer.
A lo largo de su carrera, RBD lanzó nueve álbumes de estudio, vendiendo más de 15 millones de copias en todo el mundo. Su impacto en la cultura pop fue reconocido con numerosos premios, incluyendo premios Billboard de la Música Latina y nominaciones al Grammy Latino.
Sin embargo, en 2009, para sorpresa y tristeza de sus seguidores, RBD anunció su separación. Su gira de despedida, Del Adiós, fue un emotivo final para una era que marcó a una generación. Aunque cada uno de los miembros siguió su propio camino en la música y la actuación, el legado de RBD siguió vivo, hasta 2023, año en que se confirmó su reunión e inició una gira sin precedentes que ha demostrado que sus fans, a pesar de crecer, formar familias y seguir con sus vidas, siguen siendo rebeldes de corazón.