Se le conoce como «vino de guarda» a esas botellas que podemos guardar en nuestra cava por años; sin embargo, no todos los vinos tienen las características necesarias para pasar tanto tiempo en botella. ¿Cuáles son sus características y cómo podemos identificarlos?
Los «vinos de guarda» son una gran opción de regalo para un momento muy especial, algo como una boda o el nacimiento de un nuevo integrante de la familia. Se etiqueta con la fecha y se guarda para abrirlo en momentos de celebración como aniversarios o graduaciones.
Este tipo de vinos tienen las características adecuadas para seguir madurando en botella. Generalmente con complejos con taninos fuertes, alto nivel alcohólico y mucha acidez. Con el tiempo los «vinos de guarda» sabrán diferentes porque desarrollarán otras cualidades con sus aromas terciarios.
Hay que tener cuidado pues algunos vinos fueron hechos para el consumo en el año en el que se embotelló. Si se deja guardado con el paso del tiempo solo pierde cuerpo y frescura, ahí se le conoce como que el vino «se ha caído».
La mayoría de las etiquetas mencionan su capacidad de guarda, lo primero que debemos hacer es revisarla. Si no lo dice no pasa nada, podemos darnos cuenta con otras características. El secreto está en el llamado «terroir», la combinación de cepas, suelo y climatología.
Pero la pregunta principal es ¿por qué guardarlos? pues estos vinos nos irán sorprendiendo con el tiempo pues al fermentarse irán envejeciendo con diferentes notas que no habíamos notado cuando se encontraba en una fase joven.
Una de las características principales donde te podrías dar cuenta si es un «vino de guarda» o no, es viendo el corcho. Si tiene taparrosca, corcho sintético o es un vino que pasó poco tiempo en barrica (un año o menos) no es un vino de guarda porque está hecho para disfrutar de su frescura, toques frutales y jóvenes.
Si el vino es muy ácido puede ser de guarda pues la perderá con el paso de los años. Lo mismo sucede con el nivel alto de alcohol, después de un tiempo ya no se sentirá esa sensación de calor en el pecho al tomarlo y ya no estará tan presente en copa.
Otra característica es la edad de las vides, entre más antigua, mejores uvas y por consecuencia mejor vino con capacidad de guarda.
¿Cómo cuidar un «vino de guarda»?
Ahora, una cosa es lo que las características del vino permitan pero otra muy distinta es cómo las conservamos. Para almacenar un «vino de guarda» es importante tener una cava donde no le de la luz natural directa, se mantenga fresco todo el año y no haya cambios bruscos de temperatura.
Algunas etiquetas españolas o francesas ya tienen sus «vinos de guarda» bien seleccionados para una fecha importante o simplemente hacer crecer tu colección. ¿Qué pasa si ya lo quiero beber? ¡bébelo! no pasa nada si no lo almacenas muchos años. Este tipo de marcas guardan los más especiales hechos en años climatológicamente óptimos que resultaron en una gran añada para sus botellas más especiales, revisa la información en sus apps y ve haciéndote de una cava exclusiva y deliciosa.
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