Al final sí hubo: ¿Por qué la segunda cita es la más importante?

¿Creíste que no habría segunda cita y ahora estás planeando dónde verse? En realidad ésta es mucho más importante que la primera.

En esta época se está complicando cada vez más conectar de verdad con alguien. Conocer gente nueva es complicado pues viviendo una pandemia nos hemos alejado de lugares públicos y salir ha llegado a ser muy peligroso.

Las apps de citas han tomado gran fuerza pero hacer match con alguien en la vida real es mucho más complicado de lo que se escucha. Recientemente se ha hecho viral una serie de memes que dicen «No habrá segunda cita pero al menos ya sabe…» haciendo referencia que en la primera cita no hicieron del todo click pero le enseñaste un tema de tu interés.

Y parecerá gracioso pero totalmente es la realidad; por eso la segunda cita siempre es mucho más importante que la primera pues inicialmente se conocen de manera superficial pero si deciden concretar una siguiente salida se abren otros espacios, más confianza y los nervios ya no están a flor de piel.

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«El primer encuentro no me va a decir nada, no va a ser ningún predictor de lo que va a ser la relación porque está lleno de ansiedad, desconocimiento, exigencia por los modelos, sensación que tengo que estar «actuando». No quiere decir que no haya parejas que no conecten y se sientan cómodos en la primera cita pero en general tiene que haber muchas horas de charla, intercambiar hobbies y hasta hablar de lo sexual para entrar en una zona de confianza», menciona Analía Lilian Pereyra, sexóloga y educadora.

Ese ambiente de confianza no suele darse completamente en la primera cita. Si se vuelven a llamar es porque se gustaron y quieren conocerse más, cosa que no les dio el primer encuentro. En la segunda ya llegamos más informados, mucho menos tensos y todo fluye mejor para determinar si hay conexión o no.

De igual manera entras más en confianza, la guardia baja un poco y te sientes tú mismo sin los bloqueos del primer encuentro. Aquí es donde descubres si hay compatibilidad o no, si pueden entablar un vínculo afectivo amistoso, sexual y/o amoroso.

Como consejo, en la segunda cita hagan un plan distinto a la primera, enfóquense en conocerse y divertirse; si no conectan para próximos encuentros al menos la habrán pasado bien. No hagas exigencias para el futuro como «Si no quieres formar una familia mejor no salgamos», enfócate en el presente y disfrutarlo. Olviden cualquier tinte de celos o apresurados intentos de formalización. Respétense y pásenla increíble.

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Después de la segunda cita viene la pregunta más importante: ¿Te quedaron ganas de seguir conociendo a esa persona? La respuesta para ese entonces ya tendrá más base e información y podrá ser resuelta con mayor facilidad.