Playas ocultas en Río de Janeiro que además no son turísticas

Estas playas ocultas en Río de Janeiro van más allá de las famosas Copacabana e Ipanema. Estas opciones se encuentran fuera del radar turístico, ofrecen tranquilidad, naturaleza y una conexión más auténtica con la cultura local. Aquí te presentamos ocho joyas ocultas, ideales para quienes buscan escapar y explorar los paisajes más íntimos de esta Ciudad.

Playas ocultas en Río de Janeiro

Barra da Tijuca

La playa más grande de Río, con 18 km de extensión, ofrece un ambiente amplio y relajado en una zona de conservación ambiental. Es ideal para caminatas sobre la Reserva de Marapendi y en el verano, es una playa donde se puede disfrutar de deportes acuáticos, carpas y puestos con comida, bebidas y música en vivo local para un ambiente único.

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Recreio dos Bandeirantes

Un paraíso de arenas blancas y grande olas, perfecto para surfistas y amantes de los deportes como voleibol y winsurf. Conocida por su conexión con la naturaleza, esta playa también cuenta con una ciclo vía ideal para paseos en bicicleta y vistas inigualables que empiezan en la Piedra de Pontal y se extiende por aproximadamente dos kilómetros haciéndola una reserva de naturaleza exclusiva.

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Prainha

Esta playa rodeada de vegetación, morros y selva tropical es la favorita de los surfistas. Cuenta con una pequeña franja de arena de 700 metros, la cual esta rodeada por colinas cubiertas de Mata Atlántica, ideal para quienes aman capturar amaneceres y atardeceres, ya que el sol se oculta por detrás de las montañas. En los quioscos, podrás disfrutar de deliciosos jugos naturales y si eres amante del açaí, este es tu lugar.

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Grumari

Un oasis de conservación ambiental, Grumari combina arenas blancas, mar verde esmeralda, colinas rodeadas de selva tropical y un límite de visitantes diarios que ayuda a preservar su belleza, privacidad y tranquilidad. Así que si quieres ser de los afortunados en visitarla, ve temprano y aprovecha para ver el amanecer.

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São Conrado

Conocida por sus fuertes olas, es un destino favorito para surfistas y amantes de la aventura. Con apenas un kilómetro de extensión, esta playa es perfecta para disfrutar de un día relajado con amigos o familia, rodeado de paisajes impresionantes. Además, se ha convertido en un punto popular para el aterrizaje de parapentistas y ala delta que se lanzan desde Pedra Bonita, ofreciendo una experiencia única para quienes buscan combinar adrenalina y vistas espectaculares.

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Ale

Joatinga

Una pequeña bahía en forma de media luna con difícil acceso, lo que limita la cantidad de visitantes. Sus aguas cristalinas, son consideradas las más limpias de la ciudad. Aunque se encuentra dentro de un condominio privado, la playa es pública y se accede por un empinado sendero. Se recomienda visitar temprano por la mañana, durante la marea baja y entre semana, para disfrutar de la playa casi en solitario.

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Praia do Secreto

Praia do Secreto solo cuenta con 12 metros de longitud, por lo que se le considera una “piscina natural” formada entre las rocas, y solo puedes llegar si atraviesas un camino con vistas espectaculares. Aunque su nombre sugiere lo contrario, es cada vez más conocida, pero aún ofrece un ambiente tranquilo con aguas claras.

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Praia do Perigoso

Una playa tranquila de aproximadamente un kilómetro de longitud con un entorno más aislado. Aunque su nombre significa “playa peligrosa”, es popular por sus actividades al aire libre como senderismo, surf y natación, aunque esta última no se recomienda para nadadores inexpertos debido a las fuertes corrientes y la ausencia de salvavidas. Hay un sendero que ofrece vistas panorámicas impresionantes de la playa y la costa

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