Por Alba Aguilar
No es verano si no se disfruta de la playa y el calor. Y para disfrutar en grande, no hay mejor forma que acompañar esos placeres con una copa de champagne Moët & Chandon Ice Imperial.
La primera y única en el mundo especialmente creada para ser disfrutada con hielo. Una forma completamente innovadora para degustar esta bebida, que se pudo desarrollar gracias a los 270 años de experiencia de la marca.
Sus sabor frutal presenta notas de mango, guayaba, durazno, frambuesa y grosella. El tono dulce se debe a la presencia de caramelo y membrillo, que definitivamente contrasta con la acidez refrescante del jengibre.
Un poco de Moët & Chandon Ice Impérial servido en las rocas se complementa perfecto con unas hojas de menta, ralladura de limón o naranja y/o semillas de cardamomo. También puede maridarse con platillos de mar, como langosta, róbalo, atún y cangrejo. Y hasta ser parte del postre junto con una tartaleta de limón, fresas con chocolate, helado de coco o un delicioso crème brûlée.
Estilo, audacia, elegancia y frescura… a la luz del Sol.