Podrías pensar que es una uva pero no es así, se trata de un kiwi miniatura llamado “Kiwiño” en España o “Baby Kiwi” con muchas propiedades llenas de beneficios para tu salud. Ha llamado mucho la atención en redes sociales por su apariencia pero, ¿cuál es su origen y a qué sabe?
Este curioso fruto lo encontramos principalmente en China, Japón y Rusia. Gracias a su raíz superficial es trepadora y su riego por goteo. Las hojas son de un color verde intenso que cambia en el otoño volviéndose rojas, creando un espectáculo visual en diferentes estaciones del año. También le crecen pequeñas flores blancas que complementan su belleza.
El mini kiwi se desarrolla muy rápido, tan solo 40 días después de la floración. Normalmente entre los 75 y 100 días alcanza la madurez. Tiene una gran resistencia al cambio de clima, sobre todo hacia el frío, aguantando hasta treinta grados bajo cero. Por su piel tan delgada muchas veces no soporta temperaturas tan altas pero se resuelve con un poco de sombra fresca.
Apariencia, sabor y beneficios del mini kiwi
Los mini kiwis pueden tener diferentes tamaños, formas y hasta textura, de igual manera podemos encontrar varias tonalidades en el color de la piel. Generalmente son ovalados de dos o tres centímetros muy parecidos a las uvas. Lisos, suaves y sin vellosidad, el color en la mayoría es verde claro con algunos tonos rojizos. Su pulpa es idéntica al kiwi con un sabor muy dulce como si se tratara de miel.
Se come con todo y la piel, el mini kiwi tiene hasta 15 veces más antioxidantes y una concentración de vitamina C, vitamina K, vitamina A, vitamina E, vitamina B8, luteína, betacarotenos, fibra, enzima actinidina y clorofilas. Contiene también calcio, potasio, magnesio, cobre, manganeso y hierro.
El mini kiwi ha llamado mucho la atención por su apariencia tan curiosa, su sabor es delicioso pero además es un alimento muy completo y sin residuos, genial para nuestro cuerpo y el medio ambiente.
Debe estar conectado para enviar un comentario.