Por Alba Aguilar
¿Qué mejor manera de viajar que en tu propio jet privado? Ésta manera tan única y personalizada de transportación es el pan de cada día de importantes celebridades. Perfecto para evitar las horas de espera, multitudes, y el trato tan indiferente de muchas aerolíneas. Pero como celebridades, no sólo se trata de tener un jet privado, sino de tener el mejor.
Aquí te presentamos cinco aviones de los más impresionantes (ya sea por su historia o amenidades) de las personalidades que no escatiman en ningún tipo de detalle, para que sus viajes sean lo más cómodo y placentero posible.
Boeing 757 de Donald Trump: Incluye 43 asientos (con hebillas de oro de 24k de los cinturones de seguridad), una recámara principal, comedor, cuadros decorativos, lámparas de cristal y un baño que cuenta con un lavabo e inodoro de oro.
Boeing 707-138 de John Travolta: No se tienen muchas especificaciones técnicas, pero lo que sí es impresionante es que el actor tiene su propia pista de aterrizaje ubicada en su propio hogar. Además, su avión apareció en la película Pan Am.
Bombardier Learjet 23 de Frank Sinatra: Éste modelo es uno de los más populares entre los jets privados. Todo fue gracias al legendario cantante, quien fue de los iniciadores de esta tendencia. Aunque éste avión en específico ya no está en servicio, y el dueño se mantiene anónimo, es de los que más guarda historias en su interior. Entre los pasajeros más memorables están Elvis Presley y Paul McCartney.
Convair 880 de Elvis Presley: Bautizado bajo el nombre de “Lisa Marie” en honor a su hija, se podría decir que es la atracción más importante del museo de Elvis en Graceland. Incluye una estufa, refrigerador, cafetera, habitación doble, comedor de ocho sillas, dos salas de estar, dos baños con accesorios hechos de plata y oro y 29 asientos para pasajeros.
Bombardier BD-700 Global Express XRS de Oprah Winfrey: Su tamaño no es muy grande, pero la magnate y empresaria puede disfrutar de 10 asientos de piel, televisión por satélite, e internet. El baño y la cocina fueron rediseñadas para complementar el lujoso ambiente. Y como broche de oro, las turbinas son de Rolls Royce.