La dieta paleo tal vez ya no está en su boom, pero a muchos les funcionó y la siguen haciendo. La idea es comer como lo hacían los hombres de las épocas de las cavernas, por lo que cualquier cosa que no estaba disponible para ellos en ese tiempo, está prohibido.
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Como con cualquier dieta, lo que le funciona a uno, no le funciona a todos. Por eso es importante que pruebes y consultes si este tipo de alimentación es bueno y sano para ti. Te dejamos la información que debes conocer antes de decidir cambiarte al Paleo y no arriesgues tu salud.
Qué sí comes y qué no
El consumo de proteína es lo principal, así que puedes comer carnes de todo tipo. Lo que no se debe consumir son granos, legumbres, lácteos, papas, aceites vegetales refinados, y sal. Aceites específicos, como el de coco, el aguacate y la aceituna, que también son amigables con esta dieta.
No necesariamente es para enflacar
Varios estudios han demostrado que la dieta Paleo puede ayudar a perder peso a largo plazo. Pero no es la regla, y no es una garantía, justo por la cantidad de proteína que se consume diariamente bajo este régimen. Lo que es bueno y rescatable, es que incita a buscar alimentos más reales y orgánicos contra los procesados.
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Los efectos secundarios
Al disminuir agresivamente el consumo de carbohidratos, es posible que te sientas fuera de balance, es normal. Síntomas como falta de energía, dolores de cabeza y en los músculos (que son son muy parecidos a los de una gripa) son los más comunes. Es un bache inicial, deberías sentirte mejor a poco tiempo.
¿Es saludable?
Casi ningún doctor o nutriólogo te incitaría a eliminar grupos de alimentos completos de tu dieta. Con una Paleo te puede faltar fibra, que es básica para la digestión y tu salud en general. Además, la alta ingesta de carne puede ser un problema. La recomendación diaria dicta que el consumo de pollo, cerdo o res no debe exceder los 140-170 gramos diarios, y en la dieta Paleo se consume eso, pero en cada comida.
Si la vas a hacer, considera que una rutina de ejercicio debe jugar un rol importante. Sin embargo, si los efectos secundarios no te lo permiten, mejor consulta a un experto.
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