Por Mary Gaby Hubard
Hace algunos siglos, los granjeros acostumbraban tomar siestas dentro de sus graneros, rodeados de paja. Al despertar, se sentían llenos de energía y vitalidad.
Un lujoso spa al norte de Italia adoptó esta costumbre y creó el tratamiento del “Hay Bath”. Éste es un baño de paja gruesa, dentro de una tina de agua caliente.
Los huéspedes se sumergen en paja fermentada y al salir conservan un poco de esta, se envuelven en una sábana y toman una siesta ahí dentro.
Este excéntrico y exclusivo tratamiento ayuda para relajar los músculos del cuello, aliviar contracturas, evitar calambres, articulaciones lastimadas… y hasta evitar la obesidad.
¿Estarían dispuestos a sumergirse en un montón de paja para obtener estos beneficios?
Twitter: @MGHUBARD