Qué delicia es tomar un par de días de descanso. Desconectarte de la rutina del día a día o tener la oficina a la orilla de la alberca con la naturaleza de testigo para hacer más ligera la revisión de pendientes. Amomoxtli es uno de esos paraísos que puedes encontrar a un par de horas de la capital mexicana; buena comida, desconexión del caos y contacto con la naturaleza hacen que tu experiencia valga más la pena.
Más allá del placer de poder relajarte en Amomoxtli, también tienes muchas opciones para disfrutar de diferentes actividades para pasarla bien y cambiar la rutina con algo nuevo, por ejemplo una cata de pulque o una clase de cómo hacer pan de feria en Mesa de Origen e incluso una divertida tarde de mixología para completar tu estadía.
Las habitaciones son un paraíso de silencio, desconexión de la tecnología y espacios cómodos para enfocarte en disfrutar y sí, seguramente será la palabra (disfrutar) que más leas en este texto porque eso fue lo que pasó en esta escapada a Amomoxtli. Hay varias opciones de habitaciones, pero en Amomoxtli nos consintieron con las suites que debo decirte, son imperdibles. Espacio para poder sentarte a leer dentro de la habitación, espacio para sentarte a leer o tomar una copa de vino, fuera de la habitación con una fogata y un silencio total para dormir como cuando éramos bebés. Una de las amenidades que más disfruté durante la estadía fue el servicio matutino de café y té a la puerta de tu habitación. Desde tu llegada pides que tengan ese servicio para ti, lo recibes en el horario que elijas y lo demás es disfrutar de una taza de té o café con pan de la casa mientras arranca tu día.
Ya sea que vas a prepararte para el desayuno o tomar una junta de trabajo, estás listo con tu bebida favorita y un sweet treat que difícilmente te negarías a rechazar: pan dulce de la casa.
¿Listo para el desayuno?
Mesa de Origen es uno de los lugares que más me ha sorprendido porque tiene esa versatilidad de crear platillos tradicionales para el desayuno, satisfacer los placeres del paladar para la comida y sorprender con opciones increíbles para la cena. Además de tener vistas increíbles de Parque Nacional del Tepozteco, Mesa de Origen ofrece desayunos que van desde tradicionales huevos al gusto, pasando por chilaquiles hasta opciones más locales como el Itacate. La idea de Mesa de Origen es resaltar los sabores locales con un toque especial en cada una de las opciones. jugo de naranja fresco, fruta fresca e ingredientes de la zona, permiten que Mesa de Origen sea una experiencia total desde la elección del pan dulce y las tortillas que salen caleintitas del comal hasta tu mesa.
Diría que es un espacio perfecto para establecer por un par de días las populares “slow mornings“, tomar con calma el inicio del día, disfrutar cada sorbo del café de olla y dejar que el sol y las coloridas vistas de los cerros que rodean Amomoxtli, sean tus acompañantes por esos momentos.
A la orilla de la alberca
Vamos a dejar de lado la computadora. Toma tu libro en turno, relájate y espera unos minutos para recibir la excelente atención del personal en Amomoxtli para ofrecerte la carta y las opciones de snacks y bebidas que tienen para que no hagas más que pasar las páginas de ese libro que no habías podido avanzar o simplemente, relajarte y no pensar en nada. Llega tu drink a la mesa lateral, los snacks y ahora sí, un brinquito a la alberca para broncearte un poco y dejar que los minutos transcurran sin presiones o necesidad de correr para hacer algo más que tomarlo con calma. Es parte de la filosofía que transmite Amomoxtli desde tu llegada, por un par de días deja el rush y pasa con calma tu estancia en uno de los mejores hoteles que tiene Tepoztlán.
Relajarse no está peleado con disfrutar de buenos sabores y platillos en la oferta gastronómica que tiene el hotel, así que te recomiendo que pidas las opciones de mixología (mezcal fue mi favorita) y que disfrutes de la comida en el jardín o a la orilla de la alberca, al final es una escapada que merece tener algunas reglas rotas de tu rutina.
Cenemos en Mesa de Origen
El día termina, el sol se oculta con esos destellos color naranja sobre los cerros que rodean a Amomoxtli y es momento de disfrutar de la tranquilidad de Mesa de Origen por la noche. El momento estrella ha llegado. “LOS AROMAS, LOS SABORES QUE NOS LLEVAN A LA INFANCIA, A LA COCINA DE LA ABUELA, A LA COMIDA DEL MERCADO. A LAS EMOCIONES MÁS ESENCIALES Y FELICES QUE NOS DESPIERTA UNA BUENA COMIDA”, se lee en la presentación del restaurante que ofrece una gran variedad de platillos. Todos de la mano de este argumento de llevar los orígenes en cada bocado.
Solo de recordar los sabores, me dan ganas de tomar carretera para ir a cenar una lengua de res en guaxmole o el famoso chamorro en salsa de tomate manzano, que es como cortar mantequilla en cada bocado. Si quieres algo más cercano a Morelos, entonces el plato morelense es para ti. No hay reinterpretación de platillos, simplemente retoman el tradicional plato de cecina de Yecapixtla, crema, aguacate y nopales para que puedas hacer los tacos a tu gusto. *Salivo mientras escribo estas líneas*.
¿Quieres compartir un platillo? Entonces el lomo de huachinango es perfecto para ti y tu acompañante, obvio con la recomendación de vinos de la casa y que vaya acompañado con la sopa cremosa de esquites o la sopa tepozteca. De postre, sin dudarlo te recomendaría el tamal o los churros con chocolate, son perfectos para cerrar un día excelente.
Una experiencia que puedes contemplar para desconectarte, hacer un plan en pareja o simplemente consentirte después de semanas intensas de trabajo. Puedes conocer más en el sitio web oficial de Amomoxtli.
Debe estar conectado para enviar un comentario.