Un robot esférico puede llegar a intimidar y pasar como un peligroso artefacto que nadie quiere tener cerca. Lo cierto es que Guardbot contiene otra clase de inteligencia, al ser el robot todo terreno que puede auxiliar al ser humano en situaciones extremas que implican nieve, agua, terracería o lodo.
Guardbot utiliza un sistema de propulsión que desplaza el peso de la esfera de izquierda a derecha para activar el movimiento, con la estabilidad a bordo de nueve ejes permite que ejecute sus acciones de manera óptima. Así mismo, va a una velocidad de 32km/h en tierra y 4 km/h en el agua, lo que le permite desplazarse por las superficie con buen ritmo. Su batería tiene una duración total de ocho horas en una sola carga, por lo que puede trabajar durante un día entero con tres cargas.
El robot puede ser manipulado con un control remoto o programado para una ruta específica. Sus funciones están ligadas a inspeccionar el terreno a través de cámaras, micrófonos y transmisores, por lo que la venta de Guardbot será controlada.